Luego tuvo lugar la tradicional ceremonia de agradecimiento a la Pachamama, por todos los beneficios recibidos durante el presente año, una costumbre ancestral de los pueblos andinos. Esta ceremonia fue organizada por el presidente de la cooperativa Teki Masi.
Cerca del mediodía, en una jornada soleada, los productores de la papa andina fueron instalando sus puestos, ofreciendo las diferentes variedades que se obtienen según el lugar donde se producen, tales como miskila, tonca, oca colorada, oca amarilla, oca blanca, cuarentona, dulce entre tantas otras.
Además, en la plaza central de El Alfarcito se instalaron los diferentes puestos de comidas, permitiendo a las familias deleitarse de platos tradicionales, como asado de cordero, de llama, humita, tamales, locro y una gran variedad de dulces para el postre. Algunas personas eligieron el Comedor de Griselda y otros el parador El Alfarcito.
Diferentes grupos musicales le dieron un colorido diferente y alegrando la tarde. Algunos de los cantantes que se sumaron a esta ya tradicional fiesta fueron Los ÑaÑos, Inti Suri, el dúo Tucán y Chaya, el grupo El Palomar, Alma Joven, El Malvinero, Voces del Corazón, Melodías del Viento y Leo Tejerina. El cierre estuvo a cargo de Los del Portezuelo, muy celebrado por los asistentes a la fiesta.
Los organizadores destacaron que la actividad contó con la colaboración de los profesionales del Hospital de Campo Quijano, la médica Nelly Silvestre; el enfermero Deison Paez, que junto al enfermero de El Alfarcito, Luís Paez, brindaron el apoyo sanitario. También agradecieron a la Policía de Salta, que “colaboró auxiliando a las personas”.
“Fue una fiesta tal como lo hubiese querido el Padre Chifri, quien entregó su vida por las comunidades de los cerros de Rosario de Lerma, buscando que los jóvenes encuentren en la tierra que los vio nacer, un lugar para radicarse y fomentar diversos emprendimientos”, aseguraron los organizadores.