Tras recorrer algunos lugares en busca de la difusión de su obra, en noviembre de este año, Rocha decidió compartir su trabajo en La Plata forma de You Tube, una forma de democratización de este arte que antepone el foco en lo social antes que en lo comercial.
Nuevo Diario dialogó con el director del largometraje, protagonizado por Rubén Darío Comezaña, que relata “tres días de una emoción de este padre que pierde a su hija, y que nos demandó cuatro años en 36 jornadas de rodaje”, sostuvo.
Se trata de la historia de un empleado de limpieza de una empresa que se llama “Mundo Limpio”, que encuentra un día, a su hija violada y asesinada por un delincuente. Ante este hecho traumático entra en shock: en un acto impulsivo buscará hacer justicia, y en el camino se encontrará con numerosas disyuntivas. “Quería involucrar a la gente con esta temática que está a flor de piel, en cualquier argentino”.
En la búsqueda de la puesta en común sobre el tema que aborda la película, Rocha planteó el cine debate en algunas salas, pero sin mucho éxito: “Mundo Limpio toca la política rotundamente y eso incomoda” y añadió que “Desde algunos concejos deliberantes e inclusive desde algunos espacios INCAA nos dijeron que era complicado y por eso no nos convocaron”.
Inclusive relató que en Salta buscó el espacio para compartir su trabajo en el espacio INCAA local, sin obtener ningún tipo de interés ni respuesta, por lo que decidió hacer un recorrido de medios promocionando el filme "Mundo limpio", y la accesibilidad a través de You Tube, a donde se puede encontrar la película completa desde el mes de noviembre: “Después de varios intentos de poder exponer y debatir, sin lograrlo, entendimos que “esto es para la gente”, y que al compartirlo llegamos de otra forma a las personas”, señaló e insistió en que se trata de una estrategia nueva para difundir el arte
En la entrevista, Adrián disparó en contra de algunos productos comerciales y contenidos del cine en la actualidad “Somos testigos de las películas argentinas que no llaman al público, sino que lo alejan, y los entiendo”, y advirtió:
“Aún así hay cine argentino que es muy bueno y quiere contar historias diferentes al otro cine que es patético y denso, y está sacando plata al Estado”, dijo.
Rocha dio sus primeros pasos de la mano de Jorge Coccia, luego de ser su tallerista. Años después se lanzó con diferentes propuestas sin adscribirse a ningún género en particular: “En realidad me gusta contar historias, no me importa el género”, sostuvo el cineasta que además dejó un mensaje esperanzador para quienes se preparan en este camino: “Siempre hay un camino, nunca hay que dejar de hacer lo que uno quiere y siente, por más que te digan que te vas a morir de hambre. La verdad es que es muy difícil pero no hay que renunciar a los sueños”.