Se aguarda que las sirenas de la Policía de Tránsito de la Municipalidad suene fuerte en la apertura, como cada noche que lo hizo años anteriores. Esta será la señal para que las agrupaciones artistísticas comiencen con su desfile tradicional que identifica a los carnavales salteños.
El precio de las entradas al corso fue fijada a $100 pesos mayores y menores $50 pesos. Entanto las sillas y las tribunas tendrán un costo que rondarán entre $30 y $40 pesos, dependiendo la ubicación.
La ceremonia del desentierro del canaval se celebró el pasado sábado en la que se pidió también auyentar las lluvias, tuvo lugar en medio de una tenue llovizna, a cargo del Chaman Calchaquí de la Comparsa Civilización Huayra.
Turistas y salteños participaron del convido y finalizó con el baile de las distintas agrupaciones presentes. El Mojón, como cada año fue abierto y el Chamán extrajo las botellas enterradas el año pasado y las puso al lado de las bebidas compradas este año para también brindar a la Pachamama.
La plegaria estuvo cargada de pedidos a la pachamama, entre ellas que los festejos carnestolendos se desarrollen en paz y con toda la alegría que la caracteriza. Luego se liberó al Pullay (diablo del carnaval) que quedará libre hasta el martes 12 de febrero, día que se quemará al pullay y se lo enterrará hasta el próximo carnaval, pero esto recién comienza, asi que hay todavía mucho canto y danza por delante.