La reforma del "Albo" de Duilio Botella se puso en marcha ayer, por ahora con doce bajas confirmadas. No continuarán el arquero Dei Rossi, los defensores Villavicencio, Sequeira, Lábake, Bárzola, Vega y Bellone, tampoco los volantes Bulgarelli, Saavedra ni Carrasco, ni los delanteros Aguirre y Sanfilippo.
Otros dos que también aparecen en la lista de prescindibles para Botella son Apaza y Pascuttini, con quienes la dirigencia de Gimnasia se comunicará hoy.
En contrapartida, y siguiendo con los requerimientos del DT, la dirigencia negociará la continuidad de Sand, Giménez, Cazula, Villarino, Young, Motta y Ceratto. También pretenden retener a Amieva, aunque éste ya comunicó sus pretensiones económicas en base a las ofertas que recibió para la próxima temporada. Una de ellas es desde Agropecuario de Carlos Casares, flamante campeón y ascendido a la B Nacional, dirigido por José María Bianco.
Según informaron los dirigentes, se buscará negociar con el jugador pero sería difícil equiparar las propuestas recibidas de otra categoría y otros clubes.
Ramasco piensa en colgar los botines
En medio de la euforia de las desvinculaciones, el histórico Daniel Ramasco no sólo no seguiría en el "Albo", sino que también colgaría los botines. "Tengo ganas de dejar el fútbol", admitió el mediocampista públicamente, que se tomará un tiempo para decidirlo. Botella lo quiere en su equipo.
Federico Rodríguez está a un paso de dejar Gimnasia y Tiro. El jugador no es del gusto del DT, pero la Comisión Directiva quiere que se quede, por todo lo que le dio al club.
De todos modos, el defensor estaría pensando en un cambio de aire. Algo que ya había dejado trascender en aquel partido frente a Unión de Sunchales donde cometió un penal, fue expulsado y manifestó -entre bronca y lágrimas- sus ganas de irse.