En Brónnitsy, después de un día en el que el clima no fue el mejor, estuvieron más de una hora hablando.
La cumbre, de la que participaron todos los integrantes de la delegación se dio luego de los rumores sobre un supuesto pedido del plantel para desplazar a Sampaoli.
Lionel Messi tomó la palabra, luego Javier Mascherano y también hablaron el técnico y Claudio Tapia.
El foco estuvo puesto en "limar las asperezas" que puedan existir, aprovechar la victoria de Nigeria ante Islandia que le dio una vida más a Argentina en el Mundial, y "tirar todos para el mismo lado" el martes cuando haya que enfrentar a los africanos en la última y decisiva fecha del Grupo D camino a octavos.
El jueves, tras la derrota con la selección croata, Sergio Agüero había dejado en evidencia algunos “chispazos” con el DT al declarar “que Sampaoli diga lo que quiera”.
Lo cierto es que la reunión para recomponer la relación entre los componentes ya se desarrolló y ahora el foco será futbolístico: hoy se entrenarán con la idea de empezar a diagramar el equipo de cara al choque con los nigerianos.
Habrá tiempo de trabajar hasta el lunes, cuando suban al vuelo que lo trasladarán hasta la ciudad de San Petersburgo, donde el martes se disputará el decisivo choque ante los africanos por la definición del Grupo D.
Entrenó con el ánimo golpeado
El día después del golpe sufrido con Croacia mostró a la Argentina con un clima tenso, sin las risas habituales entre sus integrantes. La práctica estaba prevista en turno vespertino a raíz de que la delegación argentina regresó el jueves apenas terminado el partido en vuelo charter al bunker de Bronnitsy, donde arribó poco después de la medianoche.
Sin embargo, el cuerpo técnico encabezado por Jorge Sampaoli dispuso que se adelantara para ver Nigeria - Islandia. Quienes jugaron contra los “balcánicos”, entre los que estuvo el capitán Lionel Messi, realizaron una serie de trabajos físicos regenerativos, con y sin pelota