El conjunto africano se impuso con tantos de M´Baye Niang y Thiago Rangel Cionek en contra. El descuento polaco fue obra Grzegroz Krychowiak.
El orden del equipo europeo se vio desbordado por la explosión y potencia física de los senegaleses. La respuesta de los polacos llegó tarde, y no alcanzó.
La polémica estuvo en el segundo tanto de Senegal: Niang, que había salido golpeado, recibió la orden del árbitro para volver a la cancha y recibió un pelotazo que lo dejó enfrentado al arquero polaco, que fue cómplice absoluto del tanto.