El juez Claudio Bonadio ordenó anoche detener a Claudio Uberti, el ex titular del Organo de Control de Concesiones Viales (Occovi) involucrado en la relación de la administración kirchnerista con Venezuela; a José María Olazagastil, ex secretario privado del ex ministro de Planificación Julio De Vido, al ex titular de la Unión Industrial Argentina, Juan Carlos Lascurain, y al dueño de Servicios Vertúa, Raúl Vertúa.
Hasta anoche ya habían sido detenidos Lascurain y Vertúa y se encontraban alojados en la Dirección de Drogas Peligrosas de la Policía Federal. Uberti y Olazagasti eran buscados.
Además de las menciones en las anotaciones del chofer Oscar Centeno, todo indica que Bonadio se inspiró en algunos datos surgidos en indagatorias que tomó ayer, de Carlos Wagner, ex titular de la Cámara de la Construcción, y la del ex Techint Luis Betnaza.
Entre los empresarios que ya fueron admitidos como imputados colaboradores está Ángelo Calcaterra, el primo hermano del presidente Mauricio Macri.
En tanto en la tarde de ayer quien decidió adelantar su declaración fue Aldo Roggio, que como adelantó PáginaI12, se había mostrado dispuesto a “colaborar al máximo con el proceso”.
Según trascendidos, otro empresario que solicitó incorporarse a la lista de colaboradores fue Jorge Neyra, gerente de Electroingeniería. En tanto, Hugo Eurnekian, sobrino de Eduardo Eurnekian (titular de Corporación América), se presentó espontáneamente como testigo en la causa.
Wagner fue el primero en declarar durante esta nueva ronda de indagatorias por las fotocopias de las anotaciones de Centeno, a partir de las que el juez Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli comenzaron a trazar una supuesta red de recaudación de coimas o aportes de campaña, que operaba el ex viceministro de Planificación Federal Roberto Baratta y, según la investigación, encabezaban como asociación ilícita los ex presidentes Néstor y Cristina Kirchner.
El ex presidente de la Cámara de la Construcción —que reúne a más de 1300 empresas del sector en todo el país— y dueño de Esuco llegó desde el penal de Ezeiza, donde permanece detenido desde el miércoles. Wagner, tal como se esperaba, solicitó al fiscal Stornelli ser incorporado como imputado colaborador para sumarse al "Club de arrepentidos" liberados, que integran Calcaterra, el ex CEO de Iecsa, Javier Sánchez Caballero, Armando Loson del Grupo Albanesi, Juan Carlos De Goycochea (ex Isolux) y Héctor Zabaleta ex directivo de Techint.
El pedido de Wagner espera ser avalado por el juez Bonadio y resta saber cómo se plantará el empresario frente a la investigación. Hasta el momento, la estrategia de los empresarios liberados fue la de señalarse como aportantes para las campañas del kirchnerismo bajo presión, pero declararon haber pagado coimas para acceder a la obra pública.
De esa manera, consiguieron quedar liberados, a pesar de que las anotaciones de Centeno se extienden más allá de los años en los que hubo un proceso electoral.
Aldo Roggio llegó pasadas las 17, del grupo empresario que administra Metrovías, la concesionaria del Subte desde 1994, que está en proceso de renovar la licitación— para solicitar ser también incorporado a la lista de "arrepentidos".
En caso de ser aceptado como imputado colaborador, Roggio sería otro hombre cercano al presidente Macri en quedar investigado y utilizar la vía del "arrepentido".