Ruarte explicó que la semana que viene la fiscala tendría que emitir su dictamen, que según lo acordado, sería de desestimiento de la acusación.
Los jóvenes concurrieron acompañados por la madre de Anahí, Alicia Linares, quien sufre de lupus y artritis rematoidea y se trata con aceite y crema de cannabis medicinal. Barnech y Bares fueron encausados luego de que en el fin de enero pasado en un allanamiento policial en su casa les secuestraran once plantas de marihuana, que cultivaban para producir la medicina para Alicia.
A pedido de Ruarte, ayer declaró ante la fiscala la madre de Anahí, quien contó cómo llegó a tratarse con cannabis. La mujer narró que hace 15 años padece de lupus y que el tratamiento de esta enfermedad le provocó a su vez una artritis rematoidea, que sufre desde hace cinco años. Linares dijo que estas enfermedades “fueron deteriorando mi calidad de vida”.
"Llegó un momento en que los dolores eran insoportables” y que incluso llegó a tener caídas por la debilidad muscular. Y en junio o julio del año pasado comenzó a consumir crema y aceite de cannabis por recomendación de una amiga médica. “Empiezo a tomar, me pongo la crema, empecé a mejorar por lo menos desde el dolor”, sostuvo.
Menos dolor
Añadió que, además de la disminución del dolor, el mayor cambio positivo lo logró en la movilidad “porque sentía que podía manejarme, sobre todo la movilidad, a mí lo que me cambió profundamente es la movilidad”.
Ruarte entregó a la fiscala una copia del fallo en el caso de Horacio Lagos, joven al que le secuestraron 61 plantas de marihuana, que usaba para producir aceite que usaba una tía suya. En este caso la Justicia Federal dictó el sobreseimiento. “Ese es el antecedente más grande de la provincia y en la Argentina uno de los más importantes”, sostuvo el abogado.
El letrado destacó que en este caso se trata de once plantas, destacó que los jóvenes no fueron detenidos, lo que atribuyó a la ley de marihuana medicinal y al avance en la discusión pública sobre el uso de esta planta para mejorar la calidad de vida de personas enfermas.
Sin embargo, consideró que “lo importante es que salgan sobreseidos”, porque “no había ni rastros ni indicios de comercio”. “Tenemos que dejar de perseguir a los cultivadores que lo hacen medicinalmente o recreacionalmente para perseguir a los verdaderos narcotraficantes, porque el problema es más grande que once plantitas o que cada uno tenga su planta en su casa, acá no se está yendo a la base del narcotráfico por eso es que la cocaína y el paco están ganando lugar en todos lados. Eso hay que erradicarlo”, sostuvo.
