El caso se generó por haber ordenado la libertad de personas que tenían órdenes de captura.
El 4 de agosto de 2017 la Corte de Justicia suspendió a Mariscal Astigueta por 5 días, sin goce de haberes más la quita del 20% de su salario por tres meses, por fallas en su actuación, entre ellas haberle mentido a la Procuración y a la propia Corte.
Cazón recordó que estas faltas se cometieron en “una falsa denuncia en mi contra, para que el Procurador me separe de la causa (por la violación a una niña) wichi”. Añadió que por ello el juez “no podía” intervenir en una causa en contra suya, por la evidente enemistad. “Ha violado todas las leyes y garantías”.
El fiscal negó los delitos que se le atribuyen: “Nunca ordené la libertad de nadie en las cuestiones que se están tramitando en la causa Tuco Mamaní”, sostuvo.
Y recordó que por la enemistad recusó a Mariscal Astigueta, cuestión que todavía no fue resuelta.
“Lo que es más grave aún, si conmigo como fiscal tiene ese comportamiento, no quiero pensar lo que hace con el ciudadano común”, advirtió.
El fiscal recordó que el comandante Gustavo Aranda le envió una nota pidiéndole disculpas y diciendo que no había consultado con él la liberación de los detenidos, y “ya cuando aparece Astigueta, cambian la declaración”, Aranda y el gendarme Rovert Willians Sosa.
Añadió que también cambiaron la fecha a un escrito suyo, del 2/12/2015 al 3/12/2016. Y que esto está denunciado en la Justicia Federal de Orán y el fiscal federal de Orán, José Luis Bruno, pidió la indagatoria de Aranda y Willians Sosa.
“Un juez normal ya habría archivado esta causa”, afirmó.
