Las mujeres iniciaron, cada una, en el 2015 dos causas en contra de Ormachea quien era el titular de la mutual, hasta el 2015. Una de las causas es por abuso sexual y la otra corresponde al fuero laboral.
Choque sostuvo que desde siempre fue acosada por Ormachea, quien a toda costa quería mantener relaciones con ella. “Sin embargo, todo se puso peor cuando un día le rechacé un obsequio que me hacía, y se trataba de un chupetín en forma de pene”, dijo Choque.
La respuesta no se hizo esperar, y quedó sin trabajo de manera inmediata. Su situación laboral durante seis años fue de empleada “en negro”.
Grande fue sorpresa cuando en dos oportunidades los abogados que lo representaban a Ormachea, en distintas épocas, le hicieron una propuesta de efectivo.
“Me dijeron que recibiría 88 mil pesos en mano, si retiraba la denuncia penal, por supuesto que dije no, porque todo lo que padecí, busca que este sujeto reciba una condena”, señaló.
La ex empleada cumplió tareas en distintas áreas de la mutual inclusive en el cementerio y en diversas campañas que se efectuaron.
Tanto Choque como Piedra, sintieron nuevamente el abuso, al observar que Ormachea se presentó en distintos medios para sostener su inocencia y que sólo esperaba su sobreseimiento para retomar su cargo frente a la mutual; cargo del que fue apartado en 2015 hasta que se aclare su situación.
El caso de Yolanda Piedra
El caso de Piedra es más sorprendente atento que es una cuñada de Ormachea, que también sufrió abuso sexual y laboral ya que fue despedida, cuando era personal de planta efectiva.
“Cumplí tareas de todo tipo desde mantenimiento de baños, hasta limpieza en el cementerio, nunca me quejé, cada día llegaba y me debía someter a sus malos tratos y gritos, una vez llegó a patear una puerta y romperla, en sus arranques”, dijo Piedra.
La mujer está en tratamiento sicológico desde antes de ser despedida, por los trastornos que todo el mal trato le provocó. Inclusive llegó a tener problemas con su hermana, y sus hijos propios que hoy viven con el padre.
“Es un tormento todo, nadie podía de mi familia, buscarme o ir por el Centro Policial, yo no sé lo que es ir a ver a alguno de mis hijos a los actos de la escuela”, dijo Piedra.
“Nadie nos defendió, dónde están los derechos que quieren garantizar para las mujeres que tenemos que soportar ese manoseo y esa amenaza de gente como Ormachea”, dijo
Fundación Azul
Rodolfo Serrano, de la Fundación Azul, acompaña a las mujeres en esta lucha porque entiende que “fueron abandonadas a su suerte, la propia comisión directiva, nunca se interesó en el tema”. Se considera que también es víctima porque fue apartado de la mutual a la que se presentó en las elecciones sólo por el hecho de denunciar las que el entiende son irregularidades.