SE CONSIDERA UNA VICTIMA

El ex juez Reynoso afirmó “ya estoy condenado de antemano”

El ex juez federal de Orán, Raúl Reynoso, hizo ayer su defensa durante tres horas. Sostuvo que el requerimiento fiscal “no es ni claro ni contundente, no acepto las imputaciones gravísimas que se me han atribuido”.

La sala de audiencias ayer, en la tercera jornada del juicio oral y público contra Reynoso y otras siete personas.
La sala de audiencias ayer, en la tercera jornada del juicio oral y público contra Reynoso y otras siete personas.

El ex magistrado fue el único de los ocho acusados que accedió a declarar ante la Sala I del Tribunal Oral en lo Criminal Federal, en la tercera jornada del juicio oral y público por estos hechos. En sus dischos eligió la estrategia del ataque.

Recordó que en 10 años de ejercicio de la magistratura en el Juzgado Federal de Orán “nunca” el Tribunal Oral en lo Criminal Federal ni la Cámara Federal de Apelaciones de Salta declararon nulidades en sus causas, “sin embargo, en 3 o 4 meses se empezó a cuestionar todo” su trabajo.

El ex magistrado cuestionó las razones para esta causa llegara a juicio en un tiempo menor que el que insumen habitualmente los trámites judiciales. ¿Por qué el apuro? se preguntó: “Es para aprovechar el impacto mediático. (...)

Yo ya estoy condenado de antemano”, se respondió. Varias veces en su declaración aludió a publicaciones de la prensa respecto de la acusación en su contra. Sin embargo, dijo que tiene confianza en los jueces Federico Díaz, Gabriel Casas y Carlos Jiménez Montilla, y “también tengo confianza en el periodismo”. 

Reynoso ocupó toda la mañana para defenderse de las acusaciones que pesan en su contra como presunto jefe de una asociación ilícita, integrada además por abogados y empleados judiciales, para beneficiar a narcotraficantes a cambio de dinero u otras dádivas. 

El ex juez también basó su defensa en el mucho trabajo que dijo que tenían en el Juzgado Federal de Orán, el único más cercano a la frontera en la provincia. Dijo que tramitó 31500 expedientes, que empezó “de cero” en el Juzgado, trabajando incluso los fines de semana, y que en este periodo envió a juicio 900 causas. “Nunca el Tribunal me declaró una nulidad” y “nunca me devolvió una causa”, y la Cámara Federal de Apelaciones dictó más de 50 resoluciones confirmando sus decisiones, incluso “confirmó decenas de excarcelaciones”, insistió. 

Aseguró que en 2013 llegó a tener 300 detenidos a cargo, “sin cárceles federales de frontera”. Y se quejó de que “cuando uno cae en desgracia nadie ve el sacrificio” que  hizo. 

Reynoso lamentó que en este proceso “solamente se miró la prueba de cargo en mi contra, y no el sinnúmero de prueba de descargo”. Sostuvo que se trata de una “causa de alto impacto mediático”, además de la gravedad institucional. También criticó que sea el único de los acusados que está está detenido.

También acusó al abogado David Leiva (el denunciante original que permitió la apertura de esta investigación) de perseguirlo. “Con el tiempo trataron de hacerla más eficiente a esta denuncia”, sostuvo. Dijo que primero se filtró un dato a la diputada nacional Elisa Carrió, y a “Echegaray” (supuestamente el ex diputado nacional Patricio Echegaray), acerca de que en el Norte se liberaba a acusados a cambio de dinero, y luego, cuando ellos hicieron denuncias públicas, fue él mismo quien pidió la apertura de una investigación. 

Niega el delito en las 9 causas

El ex juez, que tiene a su cargo su defensa, junto al abogado Federico Magno, repasó las 9 causas por las que está acusado en este juicio. En todos los casos negó haber cometido delito. 

Empezando por la primera irregularidad que se le atribuye, haber recibido un pago en $90 mil para beneficiar al encausado Guillermo Jaime Sarmiento, negó haber recibido el dinero que declaró la concubina de Sarmiento, Rosana Brites, y criticó que no se haya llamado a declarar a la persona que supuestamente puso el dinero para ese pago (la madre de Sarmiento) y a otros testigos. 

Sarmiento aparece en otras dos causas que son parte de la acusación. Reynoso dijo que en éstas la instrucción estaba delegada en el fiscal federal de Orán, José Luis Bruno. “¿No estaban los resortes legales de la Fiscalía Federal (para objetar sus decisiones)?”, planteó. Añadió que en todos los casos el fiscal consentía sus resoluciones.

“¿Ni siquiera un incumplimiento de funcionario público para un fiscal que no cuestionaba al juez?”, interrogó. 

Puesto a acusar, sostuvo que hubo causas que Bruno apelaba pero luego estas apelaciones no eran sostenidas por los fiscales Eduardo Villalba y Ricardo Toranzos, aunque no pudo decir que fuera alguna de las causas  incluidas en este proceso. 

Sobre la causa Mataca, en la que se lo acusa de favorecerlo con una prisión domiciliaria, dijo que el fiscal consintió esa decisión y que la otorgó “como concedí en muchas otras causas”.

“El derecho procesal es voluble”, afirmó en relación a resoluciones de la Cámara que él habría modificado. “Yo actuaba de acuerdo a mi saber y entender”, dijo. 

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