ESTÁ DETENIDO Y PROCESADO

Embargan al supuesto caponarco Delfín Castedo por $100 millones

El juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villena, ordenó un embargo de 100 millones de pesos sobre los bienes del sindicado caponarco Delfín Reynaldo Castedo, a quien el pasado 30 de noviembre procesó por contrabando de estupefacientes agravado.

El supuesto caponarco Delfín Castedo, fuertemente custodiado, se dirige a una de sus indagatorias en Salta.
El supuesto caponarco Delfín Castedo, fuertemente custodiado, se dirige a una de sus indagatorias en Salta.

El procesamiento, al que accedio Nuevo Diario, se sustanció “por haberse cometido por tres o más personas, reiterado en dos oportunidades”; tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, también agravado, y asociación ilícita, por considerar que es parte de la organización delictiva que lideró el abogado Carlos Salvatore, quien ya fue condenado. 

El juez entendió que Castedo aportó la droga enviada por vía marítima al Reino de España por la organización de Salvatore. Con ese fin se le requirió a Castedo “que gestionara, procurara y/o proveyera la cocaína que fue embalada en bolsas de carbón vegetal, las que luego fueron acondicionadas en contenedores  para su exportación a Europa”.

Castedo comenzó a ser investigado formalmente en esta causa el 18 de octubre pasado, luego de que un testigo imputado arrepentido asegurara que “que una persona apodada Delfín Castedo era quien proveía los estupefacientes a Carlos Alberto Salvatore” y que este Castedo “tenía una casa en Salvador Mazza, lindante con la República de Bolivia, en frontera seca”. 

Pero quizás el testigo fundamental sobre Castedo fue Blas Norberto Barberá (imputado en la asociación ilítica de Salvatore), quien ya en julio de 2005 había detallado cómo se vinculó con Castedo y cómo se organizó con éste para actividades de narcotráfico.

Esa declaración fue difundida en su momento por este diario, en el marco de la investigación del asesinato de Liliana Ledesma, luego de que denunciara el cerramiento de caminos vecinales en la finca El Pajeal para dejar la zona liberada al contrabando y otras actividades. 

A pesar de la contundencia de ese testimonio, la Justicia Federal de Salta no avanzó entonces sobre Castedo. Tampoco lo hizo la Justicia provincial, así como tampoco fue suficiente para entender que el crimen de Ledesma (asesinada a cuchilladas, una cortándole la boca) tenía un vínculo directo con el narcotráfico. 

Delfín enviaba la droga

Ahora el procesamiento destaca la declaración de Barberá, quien contó que se relacionó con una persona que “se identificaba como Delfín, oriundo de la provincia de Salta, quien le enviaba la droga en bolsas de carbón para ser colocadas dentro de contenedores y así seguir su derrotero a Europa”.

Añadió que una vez trasladada la droga, mandaba las bolsas vacías a “Salta, Pocitos, que el ‘Negro’ conocido como Delfín o ‘Pescadito’ (...) que es salteño, las recibía y luego las mandaba llenas con carbón y lo que venía adentro, en referencia a la cocaína”, que el mismo Delfín le daba “el dinero para la compra del carbón y demás actividades”.

“Que el mentado Delfín se trasladaba en camioneta 4x4, una de color negra, otra roja y otra gris, encontrándose con el mismo en la ruta 9 a la altura de Zárate o Campana, entregándole allí el dinero necesario para la actividad comercial. Que cuando el declarante le alquilaba el micro, el chofer lo contrataba el mentado ‘Delfín negro’”.

Que Delfín le pagaba  para que recibiera las bolsas, las colocara en los contenedores y las entregara en el puerto. Que “Delfín le propuso el trabajo de exportar carbón interesándole el dinero y luego vino con la propuesta de agregar unas bolsas que él mandaba armadas para colocar en los ‘tachos’ (contenedores)”. 

Barberá era quien alquilaba el micro, camión o motor home que fue detenido en jurisdicción de Campana con más de 128 kilos de cocaína, hecho por el que está acusado Delfín.   

Villena indagó a Castedo el 3 de noviembre en Salta. De la larga lista de integrantes de la asociación ilícita, solo reconoció conocer a Salvatore, porque fue su abogado a principios de la década del 2000. Por lo demás, negó la acusación. Sin embargo, en la investigación se dio con un correo electrónico del abogado en el que sostiene que Castedo proveía la droga. 

En el procesamiento se dispuso también un nuevo allanamiento sobre las fincas El Pajeal y El Aybal (que eran manejadas por Castedo), que fue concretado por Gendarmería Nacional el pasado 8 de este mes, con el fin de secuestrar todo elemento que pueda “resultar de interés para la presente pesquisa con relación a la infracción a la ley 23.737”.

El juez ordenó también la requisa de las personas y vehículos que estuvieran en esos lugares. Y ordenó que se asigne una custodia permanente para “evitar la sustracción de bienes muebles y semovientes” de los campos. 

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