La primera en prestar declaración fue su madre, Rosa Gómez, por pedido del fiscal Ramiro Ramos Osorio. Rosa no había sido formalmente pedida como testigo pero para el fiscal era necesario conocer la situación vivida por la familia desde los hechos que acontecieron la noche del 29 de enero de 2014, cuando García quedó cuadripléjico.
El fiscal entendió que incluso, por la importancia de esta situación es que precisa que el tribunal se constituya para observar la situación de García.
Gómez indicó que la primera vez que vio a su hijo tras los hechos "lo único que hacía era pedirme perdón", por lo que le había pasado. García estuvo internado en el Hospital San Bernardo y sufrió una infección intrahospitalaria. Tuvo neumonía lo cual generó el estado de coma. Y luego de eso no pudo volver a hablar.
Desde ese momento, no pudo cerrar la boca. No puede alimentarse sino por sonda y respira por traqueotomía especial para que pueda seguir respirando. Solamente se comunica por señas: saca la lengua para decir si. Cierra los ojos para decir no. "Y llora mucho", contó la mujer.
Esta situación, dijo, generó un deterioro progresivo en la salud de su hijo por contar con defensas bajas. Al presentar las fotos del antes y después del estado de salud de José María, la mujer dijo: "A mi se me cambió el mundo. Cada vez vamos pasando cosas más tristes”.
El hermano gemelo y también querellante en la causa, Manuel Jesús García, sostuvo que con lo acontecido se truncaron los proyectos que a futuro habían planificado para sus vidas.
Ayer la audiencia terminó pasadas las 18 y hoy se reiniciará la audiencia a partir de las 10.
Debían constituir el tribunal
La audiencia de ayer se demoró en iniciar dado que el juez que estaba a cargo de la causa unipersonalmente, Javier Francisco Aranibar, entendió que debían constituir el tribunal junto a otros dos de sus pares, en este caso, las juezas Norma Vera y Mónica Mukdsi que quedaron como vocales ad hoc
Las funcionarias tuvieron que interiorizarse del caso, razón por la cual el inicio de la audiencia se demoró. Los imputados son Mauro Hernando Cabral por homicidio simple en grado de tentativa en perjuicio de José María García; y Otto Bornes, Mauricio Javier Alanís, Francisco Maximiliano Chiliguay por agresión con arma impropia en contra de los García y Mauro Carrazana.