La audiencia se reanudará con los alegatos, los que se extenderán hasta buena parte de la tarde, tras lo cual el Tribunal pasará a deliberar a fin de dar a conocer el veredicto ya en horas de la noche, ya que uno de los defensores, Orfeo Maggio, representante de Patricia Sánchez y Víctor Senise, ya solicitó licencia en la Corte de Justicia, por lo que el juicio debe terminar sí o sí en la jornada de hoy.
Desde la Fiscalía, en tanto, se esperan penas elevadas para todos los acusados, incluso para los tres profesionales que están siendo juzgados por los delitos de incumplimiento de deberes de funcionario público y falsedad ideológica, como así también para el médico particular Sergio Gonza, quien sólo está imputado por el delito de falsedad ideológica.
Respecto a Sánchez y Senise, cabe recordar que los fiscales Pablo Paz y Ramiro Ramos Ossorio ya ampliaron la calificación penal contra la pareja por el delito de homicidio por placer, el que sumado al agravante de alevosía conduce indefectiblemente a una pena de prisión perpetua.
Para fundamentar tal condena los fiscales tienen pruebas de sobras, siendo las principales las aportadas por la junta médica que examinó a los menores y que describieron, para el caso de Thiago, la existencia de 276 lesiones, mientras que en Magalí encontraron 119 lesiones.
A ello, cabe sumar las numerosas testimoniales vertidas en contra de los dos acusados, como así también los reportes psicológicos y psiquiátricos que describen a los sujetos con rasgos de perversidad, sadismo y otras psicopatías severas, que de haber sido detectadas habrían impedido la entrega de las víctimas a los mismos.
Profesionales
Para el caso de Lorena Recchiutto, Marina Vargas, Mónica Rosas y Sergio Gonza, las tres primeras profesionales del ex Ministerio de Derechos Humanos, también se esperan penas elevadas, las que podrían incluso superar la barrera de la excarcelación.
Al igual que Sánchez y Senise, habría pruebas de sobra para demostrar el mal desempeño de los profesionales, ya que a lo largo del debate ninguno de ellos pudo explicar por qué, si ellos hicieron todo correctamente, ninguno detectó algunas de las 395 lesiones que fueron infringidas a Thiago y Magalí.
Asimismo la acusada Recchiutto, encargada de realizar el test para determinar la aptitud de Sánchez y Senise como padres sustitutos, tampoco pudo detectar los rasgos de sadismo y perversidad en los mismos, los que los mismos peritos indicaron son imposibles de ocultar, a menos que los test no se hayan realizados en su totalidad o de la debida forma.