LO CUSTODIARÁ GENDARMERÍA

Piden que se preserve pozo donde estaría el cuerpo de Solano

Tras advertir que el pozo de agua o jagüel donde se sospecha que fue arrojado el cuerpo del joven salteño Daniel Solano, la querella pidió ayer que se tomen medidas de seguridad para evitar que sea nuevamente adulterado.

Siguen los trabajos en busca del cuerpo de trabajador desaparecido en el jagüel o pozo en el campo rionegrino de Choele Choel.
Siguen los trabajos en busca del cuerpo de trabajador desaparecido en el jagüel o pozo en el campo rionegrino de Choele Choel.

Al final del día el abogado Sergio Heredia, representante de la querella junto a su colega Leandro Aparicio, informó a Nuevo Diario que se decidió que Gendarmería Nacional custodie el lugar. 

En declaraciones que cita el diario Río Negro, Aparicio sostuvo que “es inaudito que el señor agente fiscal no se haya tomado el trabajo de ordenar custodiar estas máquinas a la noche y haya sido la querella quien haya tenido que poner una persona”, se quejó. Los primeros días la querella debió poner un sereno, por su cuenta, pero ahora quedará Gendarmería, indicó Heredia. 

En el segundo día de trabajo en el jagüel, distintos inconvenientes demoraron el comienzo del vaciado de las distintas cosas arrojadas al pozo ubicado en la estancia La Manuela, donde se sospecha que están los restos de Solano, asesinado el 5 de noviembre de 2011, luego de hacer un reclamo salarial a la empresa Agro Cosecha, que contrataba para la multinacional Expofrut.

La bajada al pozo se complicó ayer por la presencia de caños y una bomba de agua, en desuso. Después de idas y venidas, se pudo bajar un caño que sacó hojas y huesos de un perro, contó Heredia, quien añadió que hoy se romperá directamente la bomba y el caño y se tratará de bajar una campana que gira y, a la manera de un lavarropas, va metiendo los distintos elementos que encuentre a su paso adentro.

De esta manera serán subidas las cosas arrojadas al pozo, de 80 metros de profundidad, aunque se estima que varios metro están ocupados por los elementos tirados en el jagüel, entre ellos una heladera. “Comenzamos primero a perforar con un saca testigo para romper lo que pueda haber y despés la idea es que entre la campana para poder sacar (todo), explicó el abogado, quien recordó que la tarea puede tomar entre 5 a 30 días, “pero a nosotros los tiempos nos apuran”.

La esperanza de encontrarlo

El padre del joven trabajador golondrina de la Comunidad guaraní Misión Cherenta, de Tartagal, confió ayer que se encontraba “con más fuerza, más tranquilo”, ya pasado el primer día de trabajo en el lugar del jagüel donde tiene la esperanza de encontrar los restos de su hijo. 

Gualberto Solano habló con el diario Río Negro, que siguió las maniobras minuto a minuto, y contó que anteayer por la noche pudo hablar con su familia y que sus allegados le dieron fuerzas y le pidieron que estuviera tranquilo. 
Muchas personas, entre ellas militantes de derechos humanos y de organizaciones sociales, se acercaron ayer a observar el trabajo en el jagüel.

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