Aunque la intención del Tribunal Oral en lo Criminal Federal 1 de Salta era terminar con los testimonios en diciembre pasado para dar a conocer su sentencia en marzo de este año, algunos testigos quedaron pendientes, por lo que esta primera jornada de 2017 está previsto continuar con testimoniales.
Cuatro testigos deberían declarar hoy, entre ellos Vitalino Suárez, quien en la década del 70 integraba la Seccional 318 de la Federación Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (FATRE), en Embarcación. Suárez fue mencionado por Efraín Villarroel, que era prosecretario de la Seccional 318. Esta Seccional había sido organizada por Raúl Benjamín Osores, un histórico dirigente sindical rural, que compartió militancia gremial con Felipe Burgos.
La detención ilegal y desaparición de Osores es uno de los crímenes que se juzgan en este proceso. Osores se entregó a Gendarmería en abril de 1976, en Embarcación. Su desconfianza le había salvado la vida el 24 de marzo de 1976, pero su pareja y compañera de militancia, Pía Asunción Vilte, consideraba que no tenían motivos para temerle a la nueva dictadura, porque no realizaban actividades ilegales. El mismo día del golpe fue detenida ilegalmente, cuando hacía compras en el mercadito local.
Oculto en los cerros
Osores, que había huido ni bien supo del golpe, sobrevivió oculto en los cerros cercanos a Embarcación; por las noches bajaba a la casa de Villarroel para alimentarse. En esas idas y venidas, le llegó la propuesta represora: entregarse para que su compañera recuperara la libertad. Desde Embarcación, Osores fue trasladado al Escuadrón 20 de Gendarmería, en Orán. Ahí fue visto por Vitalino Suárez, según el relato de Villarroel. Luego Osores fue llevado a la cárcel de Villa Las Rosas, en la capital provincial.
La última noticia que se tiene de él data de mayo de 1976, cuando fue visto por la ex detenida política Lucrecia Barquet. Los llevaban a la Central de Policía y Osores quiso saber si alguna de las mujeres había visto a su compañera, que seguía detenida. En la Central de Policía, ya en la fila de los que iban a ser liberados, Barquet vio y escuchó que los guardias lo retiraban, con la excusa de que tenía otra causa. Es la última imagen que se guarda de Raúl Osores.
El Tribunal tiene previsto terminar de escuchar los testimonios este mes y, de ser posible, comenzar con los alegatos, de manera de dictar sentencia en la segunda semana de marzo. En este proceso, en el que se juzga a seis hombres por actos de terrorismo estatal en perjuicio de 32 personas, sólo hay audiencias los lunes.
Los acusados son quien fuera jefe del Ejército en Tartagal, Héctor Ríos Ereñú; el ex jefe de la Comisaría de Embarcación, Arturo Madrigal; los ex jefes de Policía de Salta, Miguel Raúl Gentil y Virtom Modesto Mendíaz; el ex jefe de Seguridad de la Policía, Joaquín Guil; y el ex jefe del Escuadrón 20 Orán de Gendarmería Nacional, Diego Alejandro Varas.
