Tres testigos no citados vinieron desde La Paz a declarar

Se trata del fiscal de Materia de La Paz, Waldo López Paiva; del sargento segundo de la Policía Nacional, Hugo Teodoro Chambi Mendoza; y del periodista Richard Castillo, todos con domicilios en la ciudad de La Paz. 
Estos testigos habían sido ofrecidos el 10 de noviembre por el abogado Santos Saldaño, quien pidió también la testimonial de Rosana María Beltrán, de Salvador Mazza, a quien describió como la “esposa de Gilberto Villagómez, quien además era pareja o amante de Liliana Ledesma”. 
Paiva intervino tras la declaración de Vicente Luis Roa Aguirre, un correntido detenido en la cárcel de San Pedro (La Paz), y que estando ya en su lecho de muerte aseguró que él y un narcotraficante llamado Efraín Ichuta Vargas habían dado muerte a Ledesma. 
Chambi Mendoza es el guardiacárcel que escuchó por primera vez la “confesión” de Roa Aguirre. Y Castillo recibió a “un periodista argentino” que fue a averiguar sobre esta versión (sería Juan Antonio Abarzúa, quien por entonces trabajaba en el diario El Tribuno). 
Los tres señalaron, ante el Juzgado tartagalense, que fueron informados de que debían presentarse por el abogado Saldaño. 
“Le llama la atención que fue un extraño para el declarante a La Paz a solicitar que se presente en este Juzgado”, dijo el fiscal boliviano, quien añadió que le extrañaba que “el doctor Saldaño” no estuviera presente en el Juzgado. Algo similar dijeron los otros dos. 
Pero no les tomaron las declaraciones porque no habían sido informados la Fiscalía y la querella. Y se los citó para el 15 de diciembre, día en que ninguno de ellos concurrió a las dependencias del Juzgado de Tartagal.