El fiscal Ramiro Ramos Osorio investiga este hecho que se registró en Cerrillos donde la víctima Nelson Hipólito Olarte de 29 años, luego de una pelea con su pareja Nancy Quispe de 26 años, aducía fuertes dolores abdominales por lo que fue a la guardia del hospital de Cerrillos para ser atendido. Luego de un chequeo médico en la guardia le dieron un analgésico.
Por la presistencia del dolor regresó a la guardia y fue derivado al hospital San Bernardo, donde fue internado en terapia intensiva hasta que finalmente falleció. La Fiscalía Penal 4 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas se encarga de las actuaciones por la muerte de Olarte el vecino de Cerrillos.
Denucia del hermano
El hermano de la víctima efectúo una denuncia en en la comisaría de Cerrillos el martes último. El familiar de Olarte, que vive en la misma vivienda de la pareja protagonista de este hecho, dejó constancia que su hermano la madrugada del domingo mantuvo una fuerte discusión con Nancy Quispe, pero el decidió no intervenir.
Conttó que el lunes por la mañana, su hermano se quejaba de fuertes espasmos abdominales fue llevado al hospital de Cerrillos, donde le prescribieron un analgésico. Como los dolores continuaban, fue trasladado en ambulancia al hospital San Bernardo, donde quedó internado en terapia intensiva.
El denunciante dejó constancia que Nancy Quispe lo habría golpeado con algún elemento contundente que, según sus dichos, le habría provocado lesiones que lo llevaron a la muerte en la tarde del martes.
La mujer quedó detenida hasta que se realicen las pericias sobre lo ocurrido. El fiscal solicitó las historias clínicas en ambos hospitales para conocer que prácticas se efectuaron y corroborar si la muerte se produjo por los golpes o por alguna dolencia previa. Según las estadísticas sobre las causas por violencia de género, solo el 7% corresponde a víctimas varones.
Imputan al “Polaco”
Agustín Arnaldo Pereyra, “Polaco”, fue imputado por el delito de robo agravado por el uso de arma y su cómplice Carlos Jorge Calderón fue imputado por el delito de tenencia de armas.
Los delincuentes contaban con un raid de delitos que incluía un robo a la delegación EDESa de El Quebrachal el año anterior, donde se alzaron con una importante suma de dinero. Se pudo conocer que Calderón, de 24 años, por su parte registraba pedido de captura por diversos delitos contra la propiedad. Siempre acostumbraban ingresar encapuchados, amenazando y amedrentando a sus víctimas.
