A pesar de esas denuncias aún carece de custodia. M.G. convivió con Roberto Dario Borja durante nueves años, y tuvieron dos hijos de 4 y 8 años.
El abogado que representa a M.G., Francisco Latorre, presentó en la jornada de ayer un pedido de detención para Borja, atento que en los últimos días el hombre, por facebook, mensajeó a la mujer, señalando “Sé dónde estudias”.
“Pedí un pronto despacho para que se impute a Borja por lesiones agravadas coacción, agravada por el uso de arma y abuso sexual gravemente ultrajante, con detención inmediata”, dijo Latorre.
En sus denuncias la víctima sostiene que el hombre le propinó golpizas inhumanas, pateándola en el piso, ahorcándola hasta desmayarla y todo tipo de violencia, llegando a gatillarle el revólver en la cabeza.
M.G. dijo en una entrevista con Nuevo Diario que vive con miedo “siempre me presiona para que deje de insistir con denuncias o me matará”. La golpeó y abusó sexualmente de ella delante de sus hijos mientras la insultaba y humillaba.
“Yo sólo le reclamé la cuota alimentaria, pero él reaccionó de la peor manera, me da mucho miedo. Yo le hice la primera denuncia el 10 de noviembre, luego la reiteré, el 24 de diciembre”, dijo la denunciante.
El abogado señala que Borja nunca quedó imputado en la causa por violencia de género, “este tema podría ser otro de los tantos casos que terminan en femicidio en nuestra provincia. El calvario de esta mujer se agrava por la condición policial del agresor”.
La denunciante señaló que Borja hizo valer su condición policial evitando que colegas suyos tomarán la denuncia, obligándola a deambular herida, por todas las comisarías hasta encontrar que se las asentaran.
La fiscalía, en su momento ordenó que se le retire el arma reglamentaria al agresor quien la usaba como diversión simulando ejecuciones a la madre de sus hijos. También se le estableció medidas como prohibición de acercamiento (la cual no acató) y se le suministró botón antipánico.
El temor de M.G. no ha cesado ya que a 6 meses de las denuncias ningún resultado tuvieron sus denuncias.
Ocho años por abusar de la hija de su pareja
Un padrastro fue condenado a 8 años de prisión por abusar y amenazar a la hija de su pareja, con quien convivía.
El juez Roberto Faustino Lezcano, vocal interino de la Sala II del Tribunal de Juicio, condenó en audiencia de juicio abreviado a J.A.M. de 52 años a la pena de ocho años de prisión por considerarlo autor material y penalmente responsable del delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la guarda y la convivencia.
El juez ordenó que el imputado sea trasladado a la Unidad Carcelaria local. Asimismo, recomendó que el condenado reciba tratamiento psicoterapéutico a cargo de personal idóneo del Servicio Penitenciario, atento a la naturaleza del hecho por el cual fue condenado. El imputado es padrastro de la víctima.
La denuncia fue presentada el 5 de marzo de 2016, luego que la menor manifestara que J.A.M. la sometía a tocamientos impúdicos y la amenazaba para que no le contara nada a su madre.