Tal como se viene reiterando desde la última semana de enero, amigos y familiares de la víctima, marchan en Vaqueros, desde las 19 horas. Se reúnen en el sector de la plazoleta, ubicada sobre la ruta cortando el tráfico sólo por un minuto, con la finalidad de llamar la atención de la comunidad sobre este sangriento hecho, que a más de 70 días continúa sin un detenido.
Una vecina, que participa de las marchas, y que prefiere no ser identificada, sostuvo a Nuevo Diario “es una situación impactactante, porque en Vaqueros somos pocos habitantes, es extraño que nada se haya avanzado, nos sentimos desprotegidos, más allá de la falta de justicia, porque evidentemente un asesino está suelto”, dijo A.
Prefiere el anonimato, porque entiende que el reclamo es general, por lo tanto nadie debe ser más importante que la propia víctima. “En un principio se supo que la Policía, como siempre, levantó a cualquiera, pero luego los fueron liberando ya que nada se comprobaba”, dijo.
Nicolás Cajal, quien se presentó como querellante, apoya el reclamo de los vecinos, aunque no participa de las marchas. Sí lo hacen tres primos de la víctima, quienes también piden se aclare lo ocurrido.
El lugar, dicen los vecinos, hace rato que dejó de ser seguro, si se tiene en cuenta que existen robos, y arrebatos al igual que en otras zonas. “Nosotros en el barrio (San Nicolás donde fue asesinada Jimena) no nos acostumbramos a la idea que quien mató de esa forma brutal a Jimena todavía este libre”.