También se difundió información que da cuenta de que Hillary Clinton recibió pagos para dar conferencias.
La calificada como la peor semana del año para el candidato republicano Donald Trump comenzó el domingo pasado con la publicación de un fragmento de sus declaraciones impositivas en el que se evidencia que utilizó atajos legales para no pagar.
La última novedad fue la filtración de un audio de 2005 en el que Trump habla de manera despectiva y vulgar sobre su relación con las mujeres. A solo un mes de las elecciones, la novedad causó una oleada de repudios: al menos una docena de figuras importantes del Partido Republicano decidieron retirar públicamente el apoyo a su boleta y algunos referentes pidieron su renuncia. En respuesta, él aseguró que no piensa bajarse de la nominación, pidió disculpas por sus dichos y prometió revelar información perjudicial sobre su rival.
Casi en simultáneo, el sitio de filtraciones de documentos Wikileaks, reveló una serie de mensajes de correos electrónicos de uno de los colaboradores más cercanos de Hillary Clinton, en los que se publican, por primera vez, fragmentos de los discursos pagos que ella dio ante firmas de Wall Street, y que se había negado a divulgar.
Por estas noticias es que los analistas estiman que el debate de esta noche, en San Louis, Missouri, promete un tono menos civilizado que el anterior.