El presidente estadounidense Donald Trump cumple así con una promesa de campaña.
Las sanciones se dirigen a 13 individuos y 12 entidades relacionados con el programa de misiles balísticos de Teherán, y consisten en prohibir a los ciudadanos o a las agencias gubernamentales de Estados Unidos efectuar transacciones con los alcanzados por las medidas.
Entre las entidades sancionadas se encuentra el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, una unidad de élite de las fuerzas iraníes de defensa.
Expertos citados por el diario New York Times, cuestionaron la efectividad de las nuevas sanciones. Según el rotativo, los proveedores de partes de misiles no suelen tener relación comercial directa con Estados Unidos.
Además, diversos medios señalaron que las sanciones impuestas por Trump en el decreto de ayer ya estaban siendo consideradas y preparadas por la administración de su predecesor, Barack Obama, algo que fue admitido por el vocero presidencial, Sean Spicer, en su rueda de prensa diaria.
Los medios estadounidenses señalaron, además, que las sanciones no afectan a ningún banco iraní de importancia, ninguna instancia administrativa de gobierno o la aerolínea nacional iraní, y pusieron en duda su efectividad disuasoria.
Patrocinador del terrorismo
El asesor de Seguridad Nacional de Trump, Michael Flynn, emitió un comunicado en el que aseguró: “Los días de la vista gorda contra las acciones hostiles y beligerantes de Irán hacia Estados Unidos y la comunidad internacional se terminaron”.
Según Flynn, “Irán es el principal patrocinador mundial del terrorismo, se involucra y apoya actividades violentas que desestabilizan el Medio Oriente. La comunidad internacional ha sido demasiado tolerante con la mala conducta de Irán”, informó la página Político.com.
La política se inscribe en lo que el portavoz presidencial, Sean Spicer, declaró el “compromiso de Trump con la pacificación del Medio Oriente”, en la rueda de prensa desde la Casa Blanca, a la cual invitó a periodistas de todo el país a sumarse por vía Skype y que fue transmitida por el canal CNN.
En la “lista negra” de afectados hay empresas, socios o intermediarios de Irán, pero también del Líbano, China y los Emiratos Árabes Unidos. Todos ellos entregaron tecnología balística a Irán, se señaló en un comunicado.