Hizo estas declaracines en una entrevista con un diario alemán. Fue en referencia a una reconsideración de los sacerdotes casados en la Iglesia Católica, ante la baja en las vocaciones. “Luego tenemos que considerar qué tareas podrían desarrollar, por ejemplo en comunidades aisladas,” dijo el Pontífice.
La pregunta va dirigida a la posibilidad de la ordenación de hombres probos, que podría alcanzar a díaconos, y teólogos que podrían ser considerados para el servicio sacerdotal. Los comentarios del Papa aparecieron en una nueva entrevista en el periódico alemán Die Zeit.
Al mismo tiempo, Francisco parece haber descartado hacer opcional el celibato, diciendo que ese enfoque “no es una solución.”
Francisco dijo que la falta de sacerdotes debilita a la Iglesia “porque una Iglesia sin la eucaristía no tiene fuerza – la Iglesia hace la eucaristía, pero la eucaristía también hace a la Iglesia.” El Pontífice agregó que la cuestión debe ser enfrentada por la Iglesia “sin miedo”.
“Los miedos cierran puertas, la libertad las abre, e incluso cuando el espacio para la libertad es pequeño, abre una ventana,” dijo.
En 2014 obispos de la Amazonia ya habían planteado la necesidad de solucionar la falta de sacerdotes, atento que había lugares donde los católicos recibían los sacramentos sólo dos o tres veces al año.
En ese marco una ordenación de viudos, o casados con hijos grandes Esta sería una solución pastoral para poblaciones diseminadas en vastos territorios.