Permitirá la compra del aceite de cannabis (que produce la industria farmacéutica de Estados Unidos), para el tratamiento de patologías de algunos pacientes. No contempla el autocultivo.
La media sanción sucedió ayer en el recinto legislativo cuando el proyecto de ley que autoriza al Estado a proveer aceite de Cannabis a ciertos pacientes fue aprobado en la Cámara de Diputados de la Nación por unanimidad -221 votos a favor y ninguno en contra-, tras un debate de cuatro horas donde la oposición planteó algunas objeciones.
La iniciativa, que se coló en la agenda parlamentaria por el reclamo de madres y organizaciones, no legaliza el autocultivo, sino que se limita a habilitar al Estado para importar aceite cannábico y producirlo, una vez que esté en condiciones de hacerlo.
La dicotomía sobre autorizar o no el monocultivo atravesó toda la discusión, pero en la votación en particular diputados de distintos bloques no consiguieron modificar el artículo para dar vía libre a los familiares de pacientes.
El proyecto aprobado ayer también autoriza a investigar las propiedades terapéuticas de esta sustancia para atacar patologías como, por ejemplo, la epilepsia refractaria.
El futuro de la ley se definirá ahora en el Senado, donde aún no hay certezas sobre la fecha de tratamiento, dado que la semana que viene termina el período ordinario y el Congreso tiene otros temas políticos y económicos pendientes. Por lo que se duda que este año sea Ley.
Queda una discusión pendiente
Por ahora, todas las familias que acudieron al aceite de cannabis para poder morigerar los efectos de las epilepsias refractarias de sus hijos insisten con la necesidad del autocultivo de marihuana.
Ello en tanto el aceite de Charlotte (como se denomina el que se importa de Estados Unidos), sólo puede servir a algunos pacientes y, a veces, en algunas etapas de la aflicción dado que luego se precisa de nuevas combinaciones del cannabis medicinal. Sin embargo, el tema es aún una discusión que queda pendiente.