Esa fue una de las resoluciones que planteó la funcionaria en la reunión que ayer expuso frente a diputados sobre el tema.
La funcionaria fue convocada por distintos pedidos de informes que se solicitaron pero, ante todo, por la posibilidad de discutir proyectos de aplicación de la ESI en Salta, dado que los mismos alumnos del secundario indicaron en el operativo Aprender que era necesario tener conocimientos en esta materia, en tanto los contenidos que desde el Ministerio se sigue asegurando, fueron otorgados, para los alumnos fueron imperceptibles.
Entre la imposibilidad de contar en la actualidad con especialistas, Berruezo señaló que el posgrado en ESI podría tener sus primeros capacitados en dos años.
Por ahora, desde el Partido Obrero se presentó un proyecto para poder aplicar finalmente esta enseñanza. Sin embargo, ayer el presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Godoy, sostuvo que existen otros tres proyectos en danza.
Refutar afirmaciones falsas
La mayoría de los legisladores presentes coincidieron en que desde la cartera educativa se debería hacer una campaña de difusión respecto de la ESI que indique cuáles son los contenidos universales a dictar en las aulas y refuten tergiversaciones y mentiras que están difundiéndose por las redes sociales.
Estas mentiras, que algunos grupos militan, se instalan en muchos sectores de la sociedad salteña. Incluso sostuvieron que si bien la provincia está marcada por un exacerbado conservadurismo, los grupos que lo representan no deberían ser el límite para aplicar la ESI.
El diputado PRO, Andrés Suriani, fue la ausencia más notoria. Ante los medios se mostró como opositor a la aplicación de la ESI a la cual acusa de ser influenciada por la "ideología de género". El legislador se presentó diez minutos antes de terminar la convocatoria, sin preguntar o agregar nada en el encuentro.
Los que se oponen
En la calle, en tanto, no más de 50 personas se manifestaron bajo el lema #ConMisHijosNoTe-Metas, acompañados por integrantes del cuestionado grupo de ultra derecha "Bandera Vecinal", que llevaba su propio slogan "Dios, Patria y Familia".
Uno de sus referentes, Cristian Franco, médico, afirmó que con esta enseñanza, a los "padres" se les "quita la patria potestad", por no decidir los contenidos que se otorgan a sus hijos en las escuelas en lugar de dejar que ellos los crien bajo sus valores morales, éticos, y religiosos.
El médico interpretó la homosexualidad como “una problemática” que “en el 90 por ciento de los casos es transitoria” durante la adolescencia.
