La obra fue suspendida pero aún la Municipalidad no tomó cartas en el asunto respecto de las irregularidades. La obra se emplaza en la zona alta de San Lorenzo, cerca del barrio privado Altos de San Lorenzo. Proyecta 70 habitaciones y 100 residencias, con capacidad para albergar a 600 personas aproximadamente. Pertenece a la cadena de hoteles Accord.
Los vecinos aseguran que no se hizo un estudio hidrogeológico de la zona ni factibilidad de servicios de agua. Carece de caminos accesibles y, además, se desconocen quiénes serían los titulares del emprendimiento. Hasta el momento se desmontó la zona sin autorización y se hicieron tres terrazas en talud, entre otras obras.
El presidente de la Asociación Yungas, Carlos Douthat, indicó a Nuevo Diario que los movimientos de suelo se iniciaron en octubre del año pasado. En abril, luego de constatar que la obra no tenía los permisos correspondientes, denunciaron la irregularidad ante la Municipalidad. “Hasta el momento la Municipio no se pronunció sobre la denuncia que hicimos. En vez de suspender las obras en abril cuando denunciamos, los dejaron continuar y recién cuando terminó la audiencia pública que se hizo en septiembre pararon las obras”, sostuvo Douthat.
El vecino explicó que la obra interrumpió un curso natural de agua que es la escorrentía de los cerros del noroeste de San Lorenzo, que se llenan de agua en época estival. La obstrucción puede ocasionar desbordes y afectar a los vecinos que residen en las zonas bajas de la construcción.
“Hay un cañadón de 15 metros de profundidad que hoy tiene un terraplén que le hicieron para poder acceder al lugar donde quieren construir el hotel. Esto es algo que no podría haberse hecho sin estudios previos”, señaló. Douthat destacó además que el camino de acceso que se utiliza para la obra es el que usan los vecinos de Altos de San Lorenzo, que tiene cinco metros de ancho con curvas pronunciadas, sin posibilidades de ampliarse.
Sin obra hídrica
Carlos Douthat sostuvo que Aguas del Norte en un principio negó que haya factibilidad del servicio de agua para el hotel y que meses después sostuvo lo contrario. “No hay ninguna obra hídrica hecha, hay un proyecto de traer agua del río Lesser, lo que enoja a los vecinos de esa zona porque el agua pasa por sus narices y no tienen agua, pero sí para el hotel, lo que es contradictorio”, dijo el ambientalista.
Afirmó que originariamente, el emprendimiento era propiedad de una persona que hizo un fideicomiso del que se desconocen quiénes son los socios y el capital. “En materia ambiental es importante tener identificado los propietarios y urbanizadores porque son los responsables de los daños que pueden provocar a los vecinos y al medioambiente”, finalizó.
El llamado de audiencia pública que hizo la Municipalidad de San Lorenzo detalla que el catastro en cuestión pertenece a Hugo Jorge Canesa, presidente de la B&H Developers S.A, que se dedica a desarrollar por cuenta propia o de terceros, en el país o en el extranjero, servicios de consultoría, asesoramiento, estudio, proyecto, planificación, organización y desarrollo en el área hotelera.