Desde el hospital, en tanto, se aseguró que la atención que se dio es la que se preveía, y que si no se lo derivó a un hospital de mayor complejidad, fue porque el paciente no pudo ser estabilizado.
El sábado en horas de la madrugada, Aldo Federico Moreno sufrió un accidente en la motocicleta. Los hechos indican que quienes venían con él, tras jugar un partido de fútbol, decidieron trasladarlo y en el camino una ambulancia lo auxilió y lo llevó hasta el hospital.
Entre el accidente y la llegada a la institución pasó aproximádamente una hora. Llegó a las 2:30 y falleció dos horas después. El certificado de defunción indica que tenía "traumatismo de cráneo. Fractura de base craneana". Hasta ahí los datos en los que coinciden las versiones de la comunidad y del hospital.
Falta de atención y negligencia
Raquel Moreno, presidenta de la comunidad, dijo a Nuevo Diario que los compañeros de Aldo pidieron la ambulancia tras el accidente pero al ver que esta demoraba, decidieron cargarlo en sus motocicletas para llevarlo al hospital.
La ambulancia, dijo la presidenta, había demorado hasta ese momento unos 40 minutos. "En el camino se encontraron con la ambulancia que sólo contaba con la enfermera y el chofer", dijo la referente.
Al llegar al hospital los atendió el médico Ramiro Blanco, a quien acusó de haber maltratado a los familiares del paciente. A su vez, según Moreno, el médico trató al paciente de "borracho", y le habría dicho a la familia que se fuera "porque estaba bien y ya iba a estar estabilizado".
Pero a las dos horas "tipo 4:30 o 5 el guardia del hospital les avisó que había muerto". De allí que el reclamo que surge desde la comunidad es la razón por la cual, ante el cuadro que presentaba el paciente, no se dispuso una derivación a la Capital salteña para recibir la atención que requería.
Ricardo Luna, gerente del Hospital, aseguró por su parte que, tras el fallecimiento, el médico explicó a la familia que él intentó estabilizar a Aldo Moreno, para trasladarlo pero no lo logró. Y que además los familiares "se fueron", pese a que él les había pedido que se queden.
Más disconformidad
"Incluso el médico pidió la autopsia al forense", dijo Luna al referirse a la práctica que se realizó el domingo en horas de la mañana. Allí, el reclamo de la familia continuó dado que tras la práctica "nadie limpió el cuerpo y se tuvieron que hacer cargo los familiares. No había gasas ni nada y ellos tuvieron que usar su ropa para limpiarlo", dijo Moreno al contar lo acontecido.
Hasta ayer, los miembros de la comunidad se encontraban a la espera de una respuesta por parte de la ministra de Asuntos Indígenas, Edith Cruz.
Según se dijo desde la entidad, los abogados de la cartera intervinieron desde el primer momento y hoy viajaría a El Quebrachal para hablar con quienes están a cargo de la causa, ya judicializada. Luego, dijeron, los abogados se reunirían con la comunidad a fin de escuchar sus pedidos.