El referente dio sus apreciaciones ante las consultas que se hicieron por la situación que se vive en esta zona del norte provincial por los casos de deshidratación que llegan al hospital y que según indicó la gerenta de la entidad, Marcela Quispe, son entre 20 y 25 chicos los que llegan por día con vómitos y diarrea.
El caso de los parajes es más complicado pero tampoco la situación mejora en localidades como Misión La Paz, que tiene más servicios, tienen agua solo para la mañana "y debemos esperar a la medianoche para poder juntar", dijo en declaraciones a Radio Nacional.
Las altas temperaturas complican el panorama en la zona, donde se suman las problemáticas de riesgo nutricional de los chicos más pequeños y en situación de vulnerabilidad.
En la edición de ayer se daba a conocer la muerte de una nena más por deshidratación, quien había estado en Paraguay junto a su madre de 14 años por la época de vacaciones. Al volver, apenas si pudo ser atendida y a la media hora falleció.
Derivaciones de niños con la Policía
Gallardo indicó que los agentes sanitarios deben valerse en más de una situación de aquellos policías que están en la zona. Y es que sucede que los padres se niegan a la derivación de los chicos al hospital.
Gallardo explicó que esta reacción tiene que ver con el hecho de que no se pueden trasladar (dado que tienen otros hijos); no tienen dónde alojarse, o también reciben malos tratos en los hospitales.
“Hubo un agente que vio a un chiquito de 5 años con diarrea y no lo dejaban que se lo lleve”, dijo. Mientras, los únicos vehículos para hacer los traslados en la zona siguen siendo los patrulleros.
Gallardo explicó que las órdenes de derivar a los chicos con vómitos o con diarrea son “estrictas”, ello a fin de evitar nuevos decesos en niños menores de cinco años.
Se necesita una sala de recuperación
Si bien Gallardo destacó el hecho de que el gobernador Juan Manuel Urtubey terminó inaugurando “refacciones del hospital”, señaló que es preciso contar con una sala de recuperación.
Esta sala, sostuvo, debiera ser equipada con profesionales que a su vez atiendan y compensen a los chicos que llegan a atenderse por posibles deshidrataciones.
Adujo que es preciso además aceitar el sistema de traslado de los chicos, dado que en el Hospital Juan Domingo Perón de Tartagal (que es el más cercano a Santa Victoria Este), cuentan con una mejor contención para recuperar estos casos.
“La niña estaba desnutrida”
Por otra parte, Gallardo aseguró que la Alejandra Jazmín Chico, la niña de Misión Cañaveral que tenía un año y siete meses y falleció deshidratada, “estaba desnutrida”.
En realidad, sostuvo que según la gráfica con la que cuentan los miembros de la comunidad respecto de la situación de peso de la nena, ya desde septiembre, cuando fue internada, estaba “con bajo peso”.
Aseguró que existe el seguimiento sobre cada caso y es por ello que pueden aseverar que este fue un caso de desnutrición.
Desde el Ministerio de Salud, en tanto, se siguió con la versión oficial brindada por la gerenta del Hospital de Santa Victoria Este, Marcela Quispe. La médica señaló que si bien la nena de un año y medio estaba en bajo peso, no llegaba a contar con riesgo nutricional.
A esta muerte se sumó en la zona la de una beba de un poco más de un mes. En este caso, la lactante de Misión La Paz llegó hasta el hospital el martes en la madrugada con problemas respiratorios y falleció por bronquiolitis.
