Salvador Mazza arrancó la jornada con una nueva medida de fuerza por tiempo indeterminado. El reclamo es porque los empleados recategorizados ven drásticamente reducidos sus ingresos, no tienen aportes jubilatorios ni sindicales y pierden también el beneficio del aguinaldo y la obra social.
En octubre, los trabajadores cuando llegaron a marcar el horario de ingreso se dieron con la novedad de que habían sido bajados de categoria, por lo que decidieron en asamblea iniciar medidas de fuerza. Finalmente, tras casi dos semanas de paro, el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria.
De los 86 empleados contratados que el intendente Raúl Moreno decidió pasar a “planilleros”, 16 no fueron afectados debido a un acuerdo firmado con el gremialista de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) Rubén Moreno y la Municipalidad. Así también lo confirmo ante el Ministerio de Trabajo de Salta, el Secretario de Gobierno Daniel Campos.
A estos trabajadores se les suman otros nueve empleados de planta permanente a quienes se les descontaron del sueldo los días de paro de la última medida de huelga.
Fermín Hoyos, Secretario General de ATE, seccional San Martin, afirmó que por la medida habrá acampe, olla popular y posibles cortes de calles, con la posibilidad de que se extienda hasta Noche Buena, Navidad y Año Nuevo, si fuera necesario.