Más de un año pasó desde que sucedieron los hechos en el paraje Chirete, a unos 40 kilómetros de Morillo (en Rivadavia Banda Norte), cuando campesinos se enfrentaron con la policía que custodiaba la empresa Vertúa, a cargo del gasoducto del Noreste Argentino (GNEA), ante la protesta iniciada para pedir puestos de trabajo.
Por los hechos ocurridos el 29 de septiembre del año pasado quedaron detenidas 8 personas. Al día de hoy siguen cinco con prisión domiciliaria y uno continúa con prisión preventiva. Otros dos se encuentran muertos.
Así lo indicó el diputado por Rivadavia, Ramón Villa, tras la reunión que mantuvo en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, junto a familiares de los acusados por la Justicia.
Continúa detenido
Villa indicó que los legisladores recibieron a los familiares de Horacio Martínez, que continúa detenido en la comisaría de Morillo.
"Ellos saben que esta es una injusticia muy grande", dijo Villa al indicar que es imposible creer que se mantenga esta situación por una manifestación, que además terminó en represión y con chicos de tres años (hijos de un detenido hoy muerto), baleados.
"Si tienen que llevar a todo un pueblo se van a movilizar", dijo Villa al indicar que en principio, desde la Comisión de Diputados se espera contar con una reunión con la fiscal a cargo de la causa que se encuentra en Embarcación, Lorena Martínez.