La intención del congreso es establecer un programa y un plan de lucha que una a los obreros y a los pueblos azucareros para defender todos los puestos de trabajo, los convenios colectivos y la independencia de las organizaciones gremiales.
Claudio del Plá, referente del Partido Obrero (PO), señaló a Nuevo Diario que hoy le propondrán a Mariano Cuenta, titular del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar San Isidro (SOEASI) y en el curso de la semana a los trabajadores del Ingenio Tabacal (Orán) armar un plan de lucha "para contrarrestar los despidos masivos y la precarización laboral".
-
Artículo relacionado: Más de 700 trabajadores quedarían desocupados por el cierre del Ingenio San Isidro
Para el referente del PO "esta avanzada del Ingenio San Isidro está en consonancia con los dueños de los ingenios de Salta y Jujuy, agrupados en el CARNA (Centro Azucarero del Norte Argentino), que hoy llevan adelante sus propias medidas de ajuste contra los trabajadores. En Tabacal (Orán), aplicando el 4ª turno que reduce los salarios de bolsillo un 40%; en Ledesma (Jujuy) con decenas de despidos y el ataque al escalafón y a la organización gremial; en el Ingenio La Esperanza (Jujuy) mediante 400 despidos y represión busca viabilizar una privatización", precisó del Pla.
"Denunciamos a la Multinacional Gloria, dueña del Ingenio San Isidro, que anuncia un cese de actividades justificándose en razones financieras, económicas y laborales que les impiden seguir produciendo. La empresa repite las excusas con las que hace un par de años pretendió despedir 200 trabajadores. En aquel momento, se demostró que la empresa estaba -y sigue estando- en plena expansión de su producción y de sus negocios", señaló.
Para del Plá los verdaderos propósitos de este anuncio de "cese de actividades" hay que encontrarlos en la pretensión empresaria de reducir salarios, eliminar puestos de trabajo y descabezar a la dirección gremial que acaba de ser ratificada por el voto masivo del 90 % de los afiliados.
Crisis laboral
Cabe aclarar que la crisis planteada por la empresa pone en riesgo la estabilidad laboral de unos 700 trabajadores.
Informó a los empleados de la decisión a través de un banner colocado en el ingreso del ingenio y de solicitadas que se publicaron en algunos medios de comunicación.
Asegura que existe una crisis en el sector que provocó una significativa caída. Sostiene que tiene altos costos operativos, entre los que se encuentra el laboral, que supera el 65%.
Por otro lado apuntó al sindicato, tildándolo de “intransigente” a la hora de alcanzar acuerdos salariales razonables, provocando pérdidas económicas recurrentes.
