Friesen participó de la segunda reunión del Comité Permanente de Emergencia, en el pueblo de Santa Victoria Este. Al concluir esta reunión el gobernador destacó ante Nuevo Diario el grado de articulación logrado entre las autoridades de Salta y de Boquerón, que permitieron actuar rápidamente en la emergencia, cuando la crecida se produjo en Villamontes y se estimaba que en un día el agua iba a llegar a la zona de Misión La Paz y Pozo Hondo, desbordando las defensas.
“Acá hubo apoyo de combustible del lado argentino para el lado paraguayo, apoyo de equipo del lado paraguayo para el lado argentino, por una necesidad”, sostuvo Friesen. Destacó que “ayer mismo (por el lunes) equipos nuestros de la gobernación estuvieron ayudando a reforzar las defensas (del lado argentino). (...) Son procesos necesarios y que no pueden esperar (...), teníamos un día para hacer los trabajos o sea que no teníamos tiempo de pedir los permisos de hacer los trabajos burocráticos por Cancillería, había que accionar inmediatamente. Y eso se puede hacer cuando las bases se ponen de acuerdo”, si bien “siempre en un marco de respeto de las legislaciones de ambos países”.
En la reunión subrayó este trabajo en conjunto. “El problema era el mismo tanto para los argentinos como para el lado paraguayo y la solución era la misma y pudimos generar estos acuerdos” y hablar con autoridades nacionales “ya hablando un mismo idioma, un mismo propósito” con lo que “fue mucho más fácil hacer los trabajos”, sostuvo. A Nuevo Diario le amplió que en este caso se fue desde abajo a las autoridades máximas de ambos países.
“Hoy podemos hablar de una situación” donde pronosticaban una crecida y unos desbordes “que no se dieron, hoy queremos creer que fue gracias al trabajo”, enfatizó antes de agradecer “por ese espíritu de intercambio”.
Sin embargo, el gobernador aclaró que todavía hay que esperar una tercera o cuarta crecida en este verano.