Según lo había explicado el gerente de La Unión, Nicolás Bravo, esa fue la solución que pudieron acercar a la comunidad aunque hasta ahora no se había ejecutado del todo dado que debía existir una capacitación del enfermero antes de ocuparse de la salita.
Los habitantes de la comunidad indígena y criolla decidieron el martes cortar la ruta 13 luego de haber sufrido el lunes la falta de atención de dos pacientes que precisaban un enfermero.
Al llegar al puesto la salita estaba con llave, y en la Policía no había móviles para poder facilitar su traslado a La Unión, razón por la cual el traslado se debió hacer por vehículo particular.
Según las explicaciones del gerente, sucedió que el enfermero en funciones se encuentra con carpeta médica lo cual complicó la atención en el puesto sanitario. Mientras, se pudo conocer que la atención en ese puesto sanitario se otorga solamente de lunes a viernes quedando sin atención durante el fin de semana.
Bravo aseguró que se había cubierto el puesto sanitario el jueves de la semana que pasó. Pero al ser entre siete y ocho los enfermeros que tiene el Hospital cabecera, y ante las necesidades de atención que surgieron en la zona, no se pudo continuar con la cobertura del puesto sanitario. Mientras, en los otros dos puestos sanitarios a cargo del Hospital de La Unión la situación no es distinta, dado que cada uno tiene un solo enfermero a cargo de la atención de las salitas de los parajes.
Frente a los hechos que generaron la desesperación de la comunidad ante la falta de atención de dos personas que habían sufrido problemas de Salud, es que los integrantes de la comunidad decidieron realizar el corte sobre la ruta 13. La medida de fuerza se levantó el mismo día tras la promesa de una reunión con el intendente Leopoldo Cuenca, el gerente del Hospital de La Unión y el senador por Rivadavia Mashur Lapad.
Cumplir a medias
El compromiso se cumplió a medias dado que sólo Cuenca se hizo presente, mientras que se envió al gerente de Enfermería del Hospital a dar la solución aún pendiente.
Según indicaron los pobladores, por ahora esperarán unos 15 días para decidir si toman o no otras medidas de fuerza en caso de no haber respuestas concretas a su pedido. Y es que el enfermero todavía no había llegado al lugar.