Sin consuelo pero entero por una sola razón: buscar respuestas. Salaberría padre de Lucas, falleció el 13 de noviembre de este año, durante una expedición de exploración a cargo de la empresa Cardero Argentina S.A, de origen canadiense.
"En Cachi no informaron a la Policía, ni a ninguna institución pública de la expedición, siendo esto uno de los requisitos que se piden para desarrollar esta actividad. La exploración se realizaría al oeste de la localidad de Palermo Oeste, bajo el nombre de El Quemado, con una duración de 20 días y le ofrecieron una suma de 15.000 pesos por su participación", contó Roberto a Nuevo Diario.
Irregularidades en la expedición
Atravesado por el dolor contó: "A Lucas en ningún momento le hicieron hacer estudios médicos previos y tampoco le dijeron que la participación en la expedición sería a título de horas de prácticas y tareas de aprendizaje, como se establece en el contrato y que fue firmado el día anterior al ascenso, dado que en ninguna de las charlas Lucas manifestó que se firmaría un contrato de estas características".
Una noticia desgarradora
Un efectivo policial le tocó la puerta de su casa el 13 de noviembre a las 17:30 para anoticiarlo. "Fui a la comisaría donde se apersonó Luis Castelli, representante legal de la minera, para que yo sea informado por la Policía sin esperar mi llegada a dicha seccional, se retiró anticipadamente. No me dio la cara. Hasta la fecha nadie me dio una respuesta", aseguró.
La familia busca reconstruir los días de Lucas en Cachi, en base a testimonios para poder entender qué fue lo que sucedió. Al recibir las pertenencias del joven, quien debía presentar su tesis pronto para titularse, descubrió que los blíster de medicamentos que formaban parte de su botiquín personal, estaban consumidos, también que durante el ascenso dejó de sacar fotografías con su celular, “sospecho que sus malestares comenzaron antes de llegar al campamento”, dijo.
"No se lo que le pasó a mi hijo"
Finalmente dijo que "hasta la fecha, no tengo ninguna explicación de parte de ningún integrante de los que participaron en la expedición. No sé lo que realmente le pasó a mi hijo y cómo fueron sus últimos momentos. Espero la Justicia tome cartas en el asunto y lleguemos a la verdad, necesitamos tener paz".
Mientra Roberto Salaberría recorre las calles de Cachi en búsqueda de respuestas, su abogado Pedro García Castiella, prepara los documentos para llevar adelante la querella en contra de la minera.
