"Usaron la cabeza de Ureta y fue todo desmantelado", dijo Ciampini a Nuevo Diario al referirse a Javier Ureta Sáenz Peña, quien había sido designado por director de la Agencia Nacional de Discapacidad y que se supo renunció al cargo esta semana, generando un total de 70 despidos antes de su ida, según lo publicado ayer por el medio porteño Tiempo Argentino.
Fue al funcionario nacional que diversas asociaciones que nuclean a las instituciones que brindan los servicios especializados a personas con discapacidad, habían reclamado las deudas con las prestaciones otorgadas. Las deudas acumuladas durante este año llegan a ser de entre cinco y seis meses.
La situación en Salta fue dada a conocer por la Fundación Anidar desde donde, ante las denuncias de falta de pago de profesionales y suspensión del transporte para chicos con discapacidad, se explicó sobre la situación que se atraviesa por esta falta de pago. Desde el 11 de abril los chicos están sin transporte y hace dos meses que se adeudan los salarios de los profesionales.
Ciampini sostuvo que en una reunión que mantuvo con los delegados de ATE pudo conocer sobre la situación de desmanejo de la entidad nacional
Por otra parte, y más allá de las preguntas que se harán a Peña sobre el tema, afirmó que ya son cuatro los pedidos de informe elevados al Ejecutivo Nacional a fin de obtener una respuesta que pueda dar una explicación del no pago de las prestaciones a los distintos proveedores.
"Acá desmantelaron el funcionamiento de todo un sistema de pensiones de la CONADIS (Comisión Nacional Asesora para la Integración de las Personas con Discapacidad), que pasaron a una secretaría privada", dijo el legislador.
Sucede que esta Comisión fue reemplazada por la Agencia Nacional de Discapacidad, un ente descentralizado en la órbita de la Secretaría General de la Presidencia. En ese cambio es que Ciampini entendió que el objetivo final era "manotear el presupuesto que tenía la CONADIS".
