Estas obras corresponden a la infraestructura básica que precisan los vecinos en el barrio para poder empezar a vivir en sus viviendas, y tienen que ver con servicios de redes de cloaca, agua corriente y el pavimento.
“Los plazos de la licitación están vencidos”, dijo Sergio Agüero -uno de los vecinos- al indicar que incluso en los carteles de obra que se encuentra en el predio se especifican fechas que ya se encuentran incumplidas.
Agüero indicó que además de estos problemas se vienen sufriendo hechos de inseguridad, dado que se registran robos de diferentes materiales y herramientas que se utilizan en la construcción de las 400 viviendas que están erigiéndose.
Pese a la situación, hace pocas semanas se mudaron las primeras familias. Pero carecen incluso de un servicio normal de agua dado que, dijo Agüero, no hay suficiente presión si es que hay agua; y en otros sectores directamente el servicio es inexistente.
Por esta falla en el servicio es que los vecinos del barrio Lamadrid (también ubicado en la zona norte de la ciudad) se unieron a la manifestación de los vecinos del PROCREAR.
Agüero recordó que los vecinos vienen esperando las obras desde el momento que recibieron la adjudicación de los créditos, lo cual ocurrió el año pasado.
Indicaron que si bien las obras básicas de infraestructura debían estar desde 2015, ya en septiembre de 2016 -cuando los créditos finalmente comenzaron a otorgarse a los beneficiarios- es que los vecinos tuvieron que iniciar los reclamos por la falta de convocatoria a licitación y de disposición de mejoras en el predio para iniciar las construcciones. Las demoras los perjudicaron, pues los costos de las obras subieron.