La empresa cambió su carta ayer, tras las críticas públicas.
“Cosificar a las mujeres, ubicarlas en objetos de consumo, sólo puede ser realizado desde una perspectiva machista y patriarcal. No sólo porque, con actitudes como ésta se alienta la posibilidad que las mujeres pueden ser ‘carne’ objeto de consumo, y ubiquen a los hombres en el estándar de consumidor, sino que además, propone que no todas las mujeres pueden ser objeto selecto de consumo en función de patrones hegemónicos de belleza”, sostuvieron las organizaciones, entre ellas la Multisectorial de la Mujer.
Afirmaron las mueve “el dolor y la indignación” ante esta violencia simbólica que naturaliza las otras violencias, en días en que tuvieron que repudiar las reflexiones del delegado local del INADI, Alvaro Ulloa; en que esperan “la aparición con vida de adolescentes desaparecidas” y “nos anoticiamos del hallazgo del cuerpo de una joven mujer, con signos de violencia”.
