Los vecinos conocieron la notificación a los profesionales el lunes pasado, motivo por el cual ayer decidieron realizar una nueva manifestación que acompañó a las anteriores que se hicieron para evitar el cierre de la salita.
Las vecinas indicaron que los motivos que dieron los funcionarios de Salud fue que "es poca la productividad", o sea, el número de atenciones. Además que deben devolver el predio donde funciona hace más de 30 años y que pertenece al Centro de Salud a SUTTOS, el gremio que desde el 86 otorgó el espacio para la salita.
"No somos un número. Necesitamos el centro de Salud", dijo una de las vecinas a Nuevo Diario al indicar que en otras salitas cercanas deben esperar un día para poder ser atendidas. Agregaron que hay personas que ya se habían acostumbrado a sus médicos y seguían un tratamiento.
Pero quedaron desguarnecidos ante el alejamiento de sus médicos. El ministro de Salud, Roque Mascarello, ratificó a este medio que desde el Sindicato se requirió la devolución. Aseguró que la población del barrio tiene otros lugares en donde atenderse. "Hay varios centros de Salud cerca y consultorios y no afecta en lo más mínimo a la atención de la gente", aseguró.
Disconformes, los vecinos prevén volver a movilizarse hoy miércoles 15 de marzo en Buenos Aires al 900, donde funciona la salita. En paralelo algunos de sus referentes se reunirán con Francisco Marinaro Rodó, el secretario de Servicios de Salud, a partir de las 8.