El sujeto, que se desempeñaba como encargado, engañó a su reemplazo diciéndole que ya había acordado con la dueña su reintegro laboral. Al retomar el control, se apoderó de las ganancias de la jornada, 10 mil pesos, y se dio a la fuga.
El caso, a cargo de la fiscal penal, Gabriel Buabse, ocurrió el mes pasado, cuando la propietaria del local ubicado en la esquina de la avenida Entre Ríos y República de Siria lo denunció.
La comerciante, informó que había despedido al acusado por haberse quedado con la recaudación de una jornada laboral. Sin embargo, y mediante engaños, el sujeto regresó cuando no estaba la mujer, y repitió la maniobra.
Una semana después de ser despedido, el acusado volvió al local y engaño a su reemplazo informándole que ya había acordado con la dueña su reintegro y que la misma había ordenado que tomara el turno de 22 a 06. Sus dicho no fueron objetados y el acusado retomó las riendas del local, para posteriormente sustraer la recaudación y papeles que lo vinculaban al local, dándose luego a la fuga.
Al llegar los compañeros del nuevo turno, vieron que el local estaba abierto y que no había nadie en el mismo, por lo que le avisaron lo ocurrido a la dueña. La mujer realizó la denuncia, puesto que por segunda vez se quedó sin la recaudación de la jornada.
Cuando la propietaria hizo la denuncia aportó el número de teléfono y foto de perfil de whatsaap, la fiscalía dispuso varias diligencias en busca de dar con el sujeto. A los días, sin embargo, un hijo de la dueña identificó a Miguel Saracho de 21 años en plena via pública.