Fuentes oficiales indicaron que un grupo de policías que realizaba estrictos controles en locales bailables abiertos al público detectó que uno de ellos no contaba con las medidas de seguridad exigibles por ley ante la masiva concurrencia de personas.
Los uniformados además de verificar la documentación habilitante para el rubro, controlaron la existencia y ubicación de matafuegos descriptos en el Certificado de Mínima Seguridad contra incendio emitido por el Departamento Bomberos. Fue entonces que se dieron con la novedad que faltaba un matafuegos y que otros dos no habían sido inspeccionados, por lo que se desconocía el funcionamiento.
La Fiscalía Penal N° 5 dispuso la clausura del local y el inicio de actuaciones contravencionales por infracción al Artículo 64° al omitir la colocación y mantenimiento de los equipos contra incendio, cuyo bien protegido es la seguridad pública y a través de ella, la integridad física de las personas que allí concurran.
En tanto en el municipio de Vaqueros, la Policía detectó en la madrugada de ayer una fiesta donde se cobraba entradas y no estaba habilitada ni tenía autorización. Tres vecinos denunciaron ruidos molestos.
La fiesta se desarrollaba en una casa ubicada sobre avenida San Martín al 600, donde efectivos se entrevistaron con una mujer de 37 años responsable del evento.
Afuera de la casa, un grupo de 40 personas con entrada en mano -que tenía un valor de $40- pretendía ingresar a la fiesta.
Los uniformados constataron que el locatario carecía de autorización para la realización del evento, como habilitación municipal, certificado de mínima seguridad contra incendios, habilitación para el expendio de bebidas alcohólicas, seguro de responsabilidad civil, pago de Sadaic y Adicapif.
Intervino Fiscalía Penal N° 3 y Juzgado de Garantías Quinta Nominación, que ordenaron la clausura preventiva del lugar.