“Estamos ante un momento en América Latina donde uno puede evidenciar cierta recomposición conservadora, neoliberal dicen algunos, yo generalmente la califico como recomposición neocolonial porque entre otras cosas, además de lo político y de lo económico, lo que hay por detrás es una profunda batalla cultural, batalla de valores”, sostuvo el sociólogo Luis Wainer.
Wainer afirmó que la normalidad en el continente está más asociada a gobiernos conservadores. Pocas veces se ha visto, por ejemplo, esa articulación o sincronía inédita que hubo en la última década y media o dos décadas, según cada uno de los países”.
Dijo que por eso “distintos analistas, dirigentes vinculados a las derechas conservadoras, tienen esa pretensión de volver a un momento, uno podría decir, al 5 de diciembre de 1998, antes del triunfo de las elecciones de (Hugo) Chávez en Venezuela, que dio inicio a este último proceso, a este ciclo progresista”.
El sociólogo consideró que se debe hacer “una suerte de balance, sobre algunos límites, algunos alcances, y cuántas de las dificultades que este ciclo ha tenido hoy se ven en estos programas de las derechas que tienen epicentro en Argentina y en Brasil fundamentalmente, donde efectivamente ha habido un cambio de gobierno” en el que “Argentina que se presenta como una llave, por haber llegado por el voto democrático, para esta recomposición que yo le llamo neocolonial”.
Sin embargo, Wainer opinó que hay lugar para la esperanza de la vuelta de gobiernos progresistas con los comicios del año próximo, en Brasil, donde el ex presidente Ignacio Lula Da Silva tiene posibilidades de ser elegido. “Sería la posibilidad para volver a tener instituciones regionales latinoamericanas más fuertes” y para impulsar la economía, sostuvo.
Sincronìa mediática
Luis Wainer destacó que entre los elementos que jugaron en contra de los gobiernos progresistas en América Latina, hubo “una profunda sincronía entre las agendas de las empresas comunicacionales del continente no sólo para decir más o menos lo mismo, sino para decirlo en el mismo momento, para golpear del mismo modo y eso hoy también uno lo ve muy fuertemente en Brasil”.
Añadió que en este momento también es de observar que hay un despliegue de “otro ordenamiento de las fuerzas de seguridad en función de poner de alguna forma cierto control social más vinculado, más parecido a lo que hace algunos años viene desarrollando México y Colombia”.