Inglaterra regresó a una semifinal de un Mundial de fútbol después de 28 años de frustraciones al vencer 2-0 a Suecia en Samara y el miércoles buscará su lugar en la final de Rusia 2018 ante Croacia.
El equipo de Gareth Southgate se impuso con sendos cabezazos de Harry Maguire a los 30 minutos y Dele Alli a los 59' para sacudirse varias toneladas más de presión y continuar su reconciliación con la historia.
El estadio Arena de Samara, fue el escenario en el que Inglaterra vivió su mayor alegría futbolística en casi tres décadas. Harry Maguire abrió el marcador. Un cabezazo de Maguire le daba el triunfo parcial a su equipo.
El segundo tiempo asomaba con un ritmo diferente. Nada más empezar, Marcus Berg remató de cabeza y todo apuntaba al empate nórdico, pero la mano salvadora de Pickford mantuvo a los británicos arriba.
Con el ánimo de saberse aún vencedores, los de Southgate aumentaron sus números al 59'. Un centro perfecto de Jesse Lingard sirvió para habilitar a Dele Alli, que sólo tuvo que acomodar su testazo. Ventaja cómoda para el último tramo del juego.
Y si algunos días Harry Kane sabe anotar hat-tricks, el bueno de Pickford hoy supo firmar un triplete de atajadas fenomenal. A la del inicio del primer tiempo se le sumaron dos manos fenomenales a Claesson y, nuevamente, a Berg. Esta última con la yema de sus dedos en una parada que parecía imposible.
