La pesadilla del astro comenzó en marzo pasado, más precisamente en el encuentro que el PSG disputó, por el torneo francés, ante el Marsella. Ese día, Neymar tuvo que abandonar el campo de juego por una molestia en su pie derecho. Y los estudios revelaron lo que todos pensaban: había sufrido una pequeña fractura en el quinto metatarsiano.
Mientras sus compañeros se movían sin inconvenientes, Neymar sintió que algo no estaba bien. Se tiró en el piso. E inmediatamente pidió la asistencia del médico del plantel, quien le quitó el botín, la media, la venda para revisar la zona. La preocupacion sigue.