El club despertó rápido del impacto por el anuncio de la marcha del francés.Y se ha puesto manos a la obra para buscar un reemplazo. El primer nombre con el que ha contactado es con Mauricio Pochettino, técnico argentino del Tottenham, que encabeza la lista de futuribles en reemplazarlo.
El Madrid quiso saber de primera mano y cuanto antes la disposición del exjugador de Newell’s Old Boys para hacerse cargo del trece veces campeón de Europa.
Cabe recordar que Pochettino, que acaba de renovar con los Spurs, no tiene una cláusula que lo libere para entrenar al Real Madrid, pero sí tiene un acuerdo con el presidente del Tottenham, Daniel Levy, para que acepte negociar su salida si el técnico así se lo pide.
Horas después se conoció el nombre del alemán Joachin Low.
Nadie pudo convencerlo
Tras levantar la Champions por tercera vez, Zidane da por finalizada su etapa como entrenador en el Real Madrid, renunciando a dos años de vínculo y a mucho dinero, ese mismo al que no le ha dado un papel predominante en su carrera.
De nada sirvió que Florentino Pérez, el mandamás del merengue, tratara de convencerle el pasado miércoles durante más de dos horas. Le pidió que echara marcha atrás. Pero Zizou lo tenía decidido. Zinedine Zidane se marcha abrumado ante la posibilidad de no poder responder a las expectativas que este equipo crea en cada temporada. Sabe que la plantilla necesita cambios para rendir como le exigen desde el club. Está bien lo de la Champions League, pero quieren más o por lo menos estar a la altura de lo que es y significa el Real Madrid en Liga y Copa, algo que no ha sucedido esta temporada.
“La decisión se la había comunicado al capitán Sergio Ramos, quien me deseó suerte, más allá de lamentarse”.
Bomba en el vestuario
Una bomba. Así ha caído la marcha de Zidane en el seno del vestuario del Real Madrid, al menos entre el núcleo duro, dijo Marca. Una noticia por completo inesperada y que deja al equipo huérfano del entrenador más exitoso.
