CAMBIOS EN EL SISTEMA PARA IMPORTAR

Massa impulsa fuertes reformas para controlar la sobrefacturación de importaciones

El gobierno nacional prepara en estos días oficializar la creación del Sistema de Importaciones de la República Argentina, que reemplazará desde el 17 de octubre al Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI). Con la medida se busca ordenar y controlar la salida de dólares de las reservas internacionales del país.

NDS |

Sergio Massa, ministro de Economía.
Sergio Massa, ministro de Economía.

El sistema de control de las importaciones, persigue un orden hasta hoy inexistente en materia de comercio exterior. La vicepresidenta Cristina Kirchner señaló  este desorden como un "festival de importaciones" dada la sobrefacturación de importaciones que algunos empresarios realizaron sumado a la existencia de cautelares en la Justicia para acceder a dólares oficiales por parte de cientos de empresas.

Ejemplos del "desorden" actual se encuentran se encuentran en el registro del valor FOB (valor de la mercancía puesta a bordo de un transporte marítimo) de importaciones registradas hasta el 27 de septiembre. Las mismas ascendían a los u$s 57.531 millones acumulados en el año, pero las empresas cargaron u$s 94.076 millones al anterior sistema, cerca de un 65% superior, lo que generó una sobrefacturación de importaciones que requirió mayor compra de dólares oficiales, es decir, mayor fuga de divisas.

Además, el primer efecto concreto que fogonean desde el propio Gobierno, sería que las cautelares pendientes que pidieron las empresas para sortear las actuales trabas oficiales para importar quedarán “abstractas” en la Justicia. Hoy -estimaron- hay unas 4000, con un valor FOB de US$1000 millones que se extienden a US$1800 millones, “según los incidentes”.

Los cambios

El cambio fundamental es el cambio de fórmula para calcular la Capacidad Económica Financiera (CEF) de las empresas, cuyo cálculo está hoy bajo estricto secreto de la AFIP. La CEF es el primer filtro para acceder a dólares oficiales ya que prevé un límite a las divisas que se pueden acceder.

La Nación informó que algunas empresas “inflaban” sus créditos fiscales para modificar el cálculo de la CEF y así poder realizar más operaciones de comercio exterior. Más precisamente, se mencionaron a 204 compañías por $9445 millones.

Además el SIRA, tendrá como novedad la inclusión de la fecha estimada de giro de divisas (lo que busca darle previsibilidad a las empresas), e incorporará además una Cuenta Corriente Única de Comercio Exterior.

Con esto, el banco comercial al momento de realizar la operación de acceso a las divisas deberá registrar la operación “en línea” en una aplicación de la AFIP, la cual validará la existencia del CUIT activo, la declaración en estado autorizado (despacho, SIRA, etc), y los controles de saldo (cuenta corriente).

Este es, según la definición oficial, el panel de control que sumará el Estado con monitoreo en tiempo real de todas las operaciones y la Capacidad Económica y Financiera de las empresas importadoras.

Además el Gobierno se valdrá de la base de datos ("radar") de la Aduana, una base de datos que agrupa todas las denuncias -tanto las penales como las administrativas-, que existen sobre cada uno de los importadores.

Beneficios para las Pymes

Se darán además facilidades para pymes y entidades civiles, que tendrán la posibilidad de acceder a los pagos por importaciones a los 60 días (hoy son 180 días, lo que deja a muchas afuera de la posibilidad de importar).

La última resolución del BCRA, que implicaba que muchas firmas pidan dólares a bancos o casas matrices para importar, dejaba prácticamente al margen del comercio exterior a muchas pequeñas y medianas empresas. Este “beneficio” intenta modificar eso.

La resolución de AFIP y Comercio además generará un “trámite facilitado” para las empresas que importen que no requieran acceso al mercado único y libre de cambios (MULC), o sea, a las que no le saquen dólares al Banco Central de la República Argentina.

Se trata de una medida que marida con el articulado del proyecto de presupuesto 2023 que incorpora la posibilidad de un blanqueo para empresas que usen sus propias divisas -actualmente en negro- para la importación de insumos industriales.

Además, las fuentes oficiales confirmaron que se mantendrá la vigencia de las operaciones aprobadas bajo el anterior sistema. Precisan: “Para los importadores que no sobrefacturaron o usaron de manera abusiva cautelares” para sortear las restricciones oficiales. “Son para los permisos que tienen despacho y mercadería ingresada”, señalaron los encargados del diseño de la nueva norma.

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