El dato fue confirmado tras poner en marcha la semana pasada un refuerzo en los controles de aislamiento para colaborar con las provincias y evitar la propagación de las variantes más infecciosas, y que aún no tienen circulación en Argentina.
Por ello, la DNM realizó esta semana 747 inspecciones de domicilios declarados en ocho provincias y la Ciudad de Buenos Aires (CABA) para constatar el cumplimiento del aislamiento. En los operativos detectaron 287 incumplimientos, lo que representa el 38%.
Los controles se desarrollaron, además de en CABA, en Buenos Aires, Santa Fe, Chubut, Mendoza, La Rioja, Corrientes, Jujuy y Salta.
La titular de la DNM, Florencia Carignano, sostuvo que: "El ingreso de nuevas variantes más contagiosas y virulentas pueden poner en jaque la apertura de actividades", conseguida "con mucho sacrificio y volver a tensionar el sistema de salud", por lo que instó a "cuidar el esfuerzo que está realizando la gente".
"No puede ser que algunos no entiendan todo lo que se pone en juego; necesitamos retrasar lo más posible el ingreso de estas variantes para seguir avanzando con la vacunación y alejarnos del invierno que, de por sí, suele tener a raíz de las enfermedades estacionales un aumento de cuadros respiratorios complejos", enfatizó.
La funcionaria reseñó que: "Las personas que vuelven del exterior deben realizar obligatoriamente una semana de aislamiento y volver a testearse al término de ese tiempo", y concluyó que "no es una recomendación antojadiza y no hacerlo es un atentado a la salud pública".