El Frente Renovador también se hizo eco de las críticas al decreto, pero fue más moderado y presentó un proyecto de resolución para rechazar la medida.
En los fundamentos, la iniciativa del FpV sostiene que el jefe de Estado, "a través de un simple decreto reglamentario intenta cambiar las bases sobre las que está estructurado el sistema de Defensa Nacional, construido desde la recuperación democrática".
En este marco, los legisladores firmantes del proyecto argumentaron que el decreto es "absolutamente inconstitucional", en este caso la Ley de Seguridad Interior que impide que las fuerzas militares realicen tareas de soporte a las fuerzas de seguridad.
Destacaron, a su vez, que para entrar en vigencia la reforma perseguida por el Gobierno, se requiere además aplicar cambios a las leyes de Defensa Nacional y la de Inteligencia Nacional, "lo que obligaría al gobierno a pasar por el Congreso de la Nación a fin de lograr los consensos necesarios".
El proyecto reivindica el espíritu de la Ley de Defensa Nacional 23.554 de 1988, sancionada durante el Gobierno de Raúl Alfonsín y reglamentada en 2006 por Néstor Kirchner, que sólo avala la actuación militar en situaciones de agresión externa perpetradas por fuerzas armadas de otro Estado, dejando por fuera de su competencia el apoyo en seguridad interior.
La iniciativa, encabezada por Rossi, lleva también las firmas de los diputados del FPV-PJ Cristina Álvarez Rodríguez, Máximo Kirchner, Nilda Garré, José Luis Gioja, Eduardo De Pedro, Horacio Pietragalla y Mónica Macha; y la de la legisladora del Movimiento Evita Lucila De Ponti.
En paralelo, Del Plá presentó un proyecto similar contra lo que denominan "el decretazo" de Macri y afirmó que esa medida responde a una política "pactada con el FMI" para "avanzar en un reforzamiento represivo del Estado contra los trabajadores en el marco de la enorme ofensiva anti obrera".
"Acá no hay ninguna intención de combatir al narcotráfico. Esta no es más que la excusa del imperialismo yanqui para justificar el emplazamiento de bases militares por toda América Latina, por un lado, y la intención de profundizar la injerencia militar interna en un cuadro de luchas crecientes por parte de la clase obrera, por el otro", enfatizó.