Latorre, sostiene la maniobra de quiebra de la empresa IKBA, es para no pagarle el dinero estafado a cientos de personas que soñaban tener su casa propia.
Esta constructora de viviendas que comparte accionistas con Denario, la compañía de turismo que también perjudicó a cientos de personas en Salta, se había declarado en quiebra luego de haber librado cheques sin fondos que fueron rechazados.
“En junio mis clientes, firmaron convenios con la empresa, para buscar una solución de las deudas que tiene la empresa IKBA, pero sistemáticamente los fueron incumpliendo, quizás abonaron los dos primeros meses, pero luego nunca más”, dijo Latorre, al tiempo que agregó que en enero y febrero se debían entregar casas y terrenos, sin embargo, se está muy lejos de todo eso, ya que el propio Matías Desimone, le manifestó que no cuenta ni con empleados, ni con maquinarias.
“El propio Desimone me dijo que solo tiene una empleada administrativa, es decir continúan estafando”, remarcó el abogado durante una entrevista con Nuevo Diario.
Latorre sostuvo que en estos meses estuvo reunido varias veces con Desimone, además de contactos telefónicos y de mensajes, en la insistencia que se cumpla con lo convenido.
“Sin embargo, el mes pasado ya me confirmo que le era imposible cumplir con lo pactado y que se concursaría con lo que tiene, aunque nadie sabe que tiene, o que va a ocultar”, dijo.
Lo que más le sorprendió al abogado, es que le había asegurado Desimone que “me quedara tranquilo que dejaría fuera del concurso a mis clientes. Pero si yo guardo esa información va en contra de mis principios, por eso quiero que todos sepan. Preparan la quiebra de IKBA y estafarán a miles de salteños”, remarcó Latorre.
“Yo recomiendo que los afectados, que no tienen abogado, homologuen los convenios, embarguen los bienes que puedan y denuncien ante la fiscalía de delitos económicos, con un pedido para que se acumulen las denuncias” dijo el abogado.
Más adelante remitió a que la estafa no se cumpliría sino se contara con una complicidad del estado y la justicia. Se tratan de más de 100 denuncias que el propio secretario de Defensa del Consumidor llevó a la Fiscalía pero que nunca se acumularon.
“Esta fiscalía también se negó a se a investigar los más de 5 millones de pesos de cheques sin fondo emitidos por IKBA, cuya causa está paralizada desde la audiencia de imputación a Matías Desimone”, dijo.
Define que todo va de la mano de un perverso sistema de trabajo, donde toda denuncia, debe tener primero una mediación penal, “esto es algo irrisorio que se van a comprometer a hacer si no dan cumplimiento a lo que ya se habían comprometido, siendo un esquema a modo de filtro ya que solo interrumpe el tramite penal, y así llegar cómodamente al concurso”.
Finalmente Francisco Latorre dijo que “todos los afectados, deben saber cuál es la situación de la empresa, tengo pruebas de todo esto porque Matías Desimone me lo dijo a mi”.
