Las últimas pericias revelaron que las supuestas víctimas no presentan indicadores compatibles con los hechos imputados, lo que, en definitiva, favorece la situación del productor de modas.
Según se especula, la fiscalía frenó el pedido de juicio y la defensa planteó una revisión de la prisión preventiva, planteo que podría sacar a Pablo Marcelo Rangeón de la cárcel. Esto, al menos, es lo que esperan sus abogados defensores Roberto Reyes y Luciana Andolfi.
En vista del resultado de la pericia realizada por el Cuerpo de Investigaciones Fiscales sobre tres de las denunciantes, les quitaron peso a las acusaciones contra Rangeón, los defensores plantearon la revisión de la prisión preventiva.
El 2 de junio pasado, cabe señalar, la jueza de Garantías 8 Claudia Puertas le había concedido a Rangeón la prisión domiciliaria. Su detención, concretada el 6 de marzo pasado, se dispuso tras la denuncia de Sabrina Gerez, a la que siguieron otras cuatro más.
En todas, las acusaciones contra Rangeón fueron por hechos de abusos sexuales cometidos cuando las víctimas eran modelos, o bien, trabajaban en la agencia del acusado, pero, sin dudas, la de mayor peso fue la radicada por Gerez, quien no sólo relató hechos de abuso sexual, sino también episodios de violencia de género, uno de los cuales derivó en la pérdida de un embarazo debido a los golpes que Rangeón le había propinado.
Tras ser beneficiado con el arresto domiciliario, el fiscal Rodrigo González Miralpeix apeló la medida. En su defecto, el juez Luciano Martini, de la Sala I del Tribunal de Impugnación, revocó la prisión domiciliaria a Rangeón y ordenó que vuelva a la cárcel.
Posteriormente, cuando se conoció el resultado de las pericias psicológicas de tres de las denunciantes, la defensa puso manos a la obra y, en vez de apelar el fallo del juez Martini, decidieron ir por el camino más corto y plantearon una revisión de la prisión preventiva ante la misma jueza Puertas.
En esta oportunidad, la defensa sacó lustre a una prueba de la misma fiscalía: el informe de los psicólogos del CIF respecto de Gerez, Camila Figueroa Ritzer y Janet Plaza, cuyos relatos perdieron peso tras el tamiz psicológico.
Sobre Gerez, por ejemplo, la defensa aseguró que la misma no presenta síntomas coincidentes con episodios traumáticos de abusos sexuales, al menos, que encajen con la extensa denuncia que presentó en contra de Rangeón.
“No surgen indicadores compatibles con vivencias sexuales traumáticas ocurridas de manera reciente; sin embargo, surgen indicadores de sufrimiento psíquico y sexual acontecidos en un tiempo lejano y pretérito, es decir, en los primeros años de vida y de desarrollo psíquico.”, reza el reporte del CIF sobre Gerez.
Tampoco surgen elementos compatibles que “permitan inferir que en la actualidad Sabrina se encuentre atravesando una situación de vulnerabilidad e indefensión”.
“Se infiere como mecanismo de defensa dominante: la disociación. En segundo lugar, emplea la evasión, evitación e idealización. Se infiere en Sabrina una marcada perturbación en el curso del pensamiento lógico que surge como efecto de su historia de vida personal. De ello se desprende su tendencia a alterar la verdad de los hechos y la tendencia a la mendacidad”, agregaron los profesionales de la salud mental del CIF.
Desmienten una pérdida de un embarazo por golpes
A las definiciones realizadas en materia psicológica de Gerez, las cuales el abogado Reyes calificó de categóricas, el letrado afirmó que sumaron varias declaraciones de testigos que ratificaron el vínculo amoroso que unía a Gerez con Rangeón, algo que la denunciante intentó ocultar para presentarse como empleada de la agencia.
Asimismo, la defensa presentó varias denuncias realizadas por su cliente en contra de Gerez en distintos juzgados de Violencia de Género. Y para rematar, agregaron la historia clínica girada por el Hospital Materno Infantil, en la cual se reportó que la joven, quien había sostenido la pérdida del embarazo por los golpes del acusado, había sido atendida por un aborto, pero que en el mismo no se advirtió que haya sido a causa de lesiones.
En cuanto a Figueroa Ritzer, la defensa indicó también la ausencia de supuestos indicadores de abuso hacia su integridad sexual. “A nivel psíquico no se registran indicadores de abuso hacia su integridad sexual”, señala el reporte.
En las conclusiones, el informe expresa: “surge un rechazo a la sexualidad masculina. No surge inscripción psíquica de vivencias disruptiva en su sexualidad”. Janet Plaza, en tanto, “muestra una tendencia a adecuar la realidad a una perspectiva propia pudiendo la misma ser errónea, alejándose de este modo de la realidad”.
“Cuenta con mecanismos defensivos tales como la disociación y la anulación. Presenta indicadores compatibles con vivencias traumáticas a nivel familiar y vincular”, agrega la prueba remitida por el CIF en torno a esta denunciante.
La defensa espera que la jueza Puertas repita su decisión del 2 de junio y otorgue a Rangeón el arresto domiciliario. “Lo que pedimos es la medida más justa, pues las denuncias, no tienen el asidero que las denunciantes intentaron darle y, eso, ahora está saliendo a luz”, dijo Reyes.
