Teruel cumple una pena de doce años de prisión efectiva como autor material y penalmente responsable de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante por las circunstancias de su realización reiterado en concurso real (cuatro hechos), en concurso ideal con corrupción de menores agravada por tratarse de una menor de trece años y por mediar engaño y del delito de abuso sexual con acceso carnal, en concurso real.
La Sala II del Tribunal de Impugnación rechazó el recurso de casación de la defensa y al acoger parcialmente los de la fiscalía y la querella, confirmó la sentencia y la pena impuesta modificando la calificación legal de los cuatro hechos cometidos por la de abuso sexual con acceso carnal. La misma sala denegó la inconstitucionalidad contra lo cual la defensa presentó la queja.
Al resolver, los jueces de la Sala II de la Corte de Justicia recordaron que los razonamientos contenidos en el planteo “no están orientados a desvirtuar los fundamentos de la resolución que deniega el recurso de inconstitucionalidad, sino –más bien- a atribuir arbitrariedad a la resolución del Tribunal de Impugnación que resolvió los recursos de casación oportunamente interpuestos, motivo por el cual resultan inatendibles en la presente instancia.”
Señalaron que “la garantía del doble conforme se ha cumplido, en razón de haber intervenido el tribunal de casación, al que accedió el presentante haciendo uso del recurso establecido por los artículos 539 a 553 del Código Procesal Penal. Tal recurso, resuelto por la Sala II del Tribunal de Impugnación, permitió revisar la totalidad de la sentencia condenatoria, en todo cuanto fue posible sin afectar la inmediación propia del juicio oral, como lo propicia la Corte Federal en el precedente “Casal”.
Condenado por lesiones a su pareja
El juez de la Sala II del Tribunal de Juicio de Metán Sebastián Fucho condenó a Ramón Ángel Rojas, de 21 años, como autor de los delitos de lesiones agravadas por mantener una relación de pareja y por el género (dos hechos) y desobediencia judicial (tres hechos), y le impuso la pena de un año y seis meses de prisión de ejecución condicional.
El joven deberá fijar domicilio en el radio del Tribunal por el término de dos años. Tendrá prohibido ejercer cualquier tipo de actos de violencia contra la denunciante, y no podrá acercarse a su domicilio. En caso de incumplir alguna de estas reglas de conducta podría dejarse sin efecto la modalidad condicional de la pena impuesta, y en ese caso convertirla en efectiva.
Fue denunciado en cuatro oportunidades por su pareja.
Amenazó a su padre
La jueza María Soledad Rodríguez, vocal de la Sala I del Tribunal de Juicio, condenó a Roberto Jesús Killo (28) a la pena de un año de prisión de ejecución efectiva por ser responsable del delito de amenazas con arma.
El hombre se encontraba en estado de ebriedad y concurrió a la casa de sus padres para pedirles dinero. Cuando su papá se negó él sacó un machete con el que los amenazó.
En el fallo se ordenó informar lo decidido al Juzgado de Violencia Familiar. Cuando terminó la audiencia Killo fue trasladado hacia la Alcaidía de Tartagal.
Lo condenan a 5 meses de prisión por reincidente
La jueza de Garantías 1 Ada Zunino condenó en juicio abreviado a un joven de 24 años por ser considerado autor del delito de hurto simple, y le impuso la pena de cinco meses de prisión efectiva. Además, lo declaró reincidente por primera vez atento a los antecedentes condenatorios que registraba.
El 27 de octubre pasado fue denunciado por el propietario de un taller mecánico ubicado en barrio Miguel Ortiz. El hombre contó que quedó registrado en las cámaras de seguridad el ingreso del joven la noche anterior al local, desde donde sustrajo una notebook y un escáner para diagnóstico de vehículos.
El día en que radicó la denuncia, el hombre recibió un llamado telefónico en el que le informaron que el joven que había ingresado en el taller se encontraba saliendo de las canchas de fútbol ubicadas sobre la avenida Constitución, aún vestido con la misma ropa con la que había cometido el hecho.
